El Partido de los Trabajadores (PT) lanzó oficialmente, para las elecciones presidenciales de octubre próximo, la candidatura de Lula da Silva, quien sigue encarcelado por acusaciones de corrupción en su contra.
Dos mil delegados aprobaron, a mano alzada, la designación de Lula como candidato, quien era favorito en los sondeos pese a la condena impuesta de 12 años de cárcel por corrupción.
"No existe política en Brasil, sin hablar de Lula y sin hablar del PT", declaró en la convención partidaria en Sao Paolo la presidenta del PT, Gleisi Hoffman.
Durante la votación de los delegados se leyó una carta de Lula, en la que denuncia las orientaciones del gobierno conservador de Michel Tremer, que llegó al poder en 2016 tras la destitución por el Congreso de la mandataria Dilma Rousseff.
Por su parte, la senadora y líder del PT exclamo que "No les tememos, ¡Vamos a seguir nuestra marcha, vamos a sacar a Lula de la cárecel".
El ex presidente de Brasil purga una condena por 12 años y un mes de cárcel por corrupción pasiva y lavado de dinero, pues el juez Sergio Moro lo halló culpable de haberse beneficiado de un apartamento en el litoral paulista ofrecido por la constructora OAS, a cambio de mediaciones para obtener contratos en Petrobras.
Geraldo Alckmin, candidato por el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB)
Por su parte, el ex gobernador de Sao Paulo, Geraldo Alckmin fue proclamado en una convención nacional con 288 votos a favor y uno en contra como el candidato del PSDB.
"Me ofrezco para devolver a los brasileños la esperanza que les fue robada y liderar una amplia alianza de quienes creen en el desarrollo y no en la perdición del radicalismo", dijo Alckmin al aceptar la candidatura.
Dirigentes del PSDB admitieron que el principal obstáculo de Alckmin en la contienda electoral puede ser su casi absoluta falta de carisma, que él reconoció.
Lula, Alckmin y los sondeos
Lula lidera los primeros sondeos con un 30 por ciento, aunque cuando no es considerado los encabeza el ultraderechista Jair Bolsonaro (17%), seguido por la ecologista Marina Silva (13 por ciento) y el laborista Ciro Gomes (8 por ciento), mientras que Alckmin se sitúa con un 6 por ciento.
En un escenario con cerca de un 50 por ciento de indecisos en el que pretenden pescar.
bgpa