Carlos III dejará para más adelante su viaje a Francia, cancelado por petición del presidente Emmanuel Macron debido a las protestas contra la reforma de las pensiones, lo que convertirá a Alemania en su primer destino al extranjero como rey británico.
El monarca inglés, de 74 años, y la reina consorte Camila, de 75, "esperan con gran interés la oportunidad de visitar Francia tan pronto como se puedan encontrar fechas", anunció el viernes el Palacio de Buckigham, dos días antes de su partida prevista hacia París para la que debía ser su primera visita de Estado desde que subió al trono en septiembre.
"La decisión se tomó con el acuerdo de todas las partes, después que el presidente de Francia pidiera al gobierno británico aplazar la visita", prevista del 26 al 28 de marzo, declaró en Londres un portavoz del primer ministro Rishi Sunak, que la víspera había afirmado "no tener conocimiento de ningún cambio de planes".
Silencioso hasta ahora al respecto, en los últimos días Buckingham había seguido de cerca la turbulenta situación en Francia, donde toneladas de basura se acumulan en las calles y un sindicato de trabajadores ferroviarios había afirmado que el viaje del monarca británico, ciudadosamente preparado durante meses, estaba "en su punto de mira".
Según la prensa británica, la logística del viaje se había estado revisando desde hace días y se estudiaban medidas para reducir las interacciones de la pareja real con el público francés.
Mucho menos popular que Isabel II, fallecida el 8 de septiembre, Carlos III ha sido abucheado por un puñado de antimonárquicos durantes recientes viajes en el Reino Unido.
Carlos y Camila debían viajar de París a Berlín el día 29. Pese al cambio de última hora, mantendrán su visita de Estado a Alemania, prevista hasta el 31 de marzo.
Estos viajes al extranjero, antes incluso de su ceremonia oficial de coronación el 6 de mayo en Londres, buscaban celebrar una Historia compartida, pero también "mirar al futuro mostrando las muchas formas en que el Reino Unido trabaja en colaboración con Francia y Alemania", había dicho el palacio, citando "la lucha contra el cambio climático y la respuesta al conflicto en Ucrania".
Pese a que ahora será Alemania, otro importante socio europeo, el primer destino oficial de Carlos III desde la muerte de su madre, el hecho de que previera hacerlo a Francia pocas semanas después del propio Sunak, muestra una "mejora de relaciones entre los dos países tras un periodo difícil", explicó a la AFP el exembajador británico en Francia Peter Ricketts.
"Las cosas fueron mal en los años posteriores al Brexit (...) no había confianza en París en Boris Johnson", dice sobre el controvertido ex primer ministro. "La llegada de Rishi Sunak, mucho más compatible con el presidente Macron, ha cambiado mucho las cosas", agrega.
El programa, ahora aplazado sin fecha, incluía una ofrenda floral en el Arco del Triunfo junto a Macron y su esposa Brigitte y un discurso del monarca ante los diputados y senadores franceses.
Carlos III, férreo defensor de la ecología, también preveía realizar en Burdeos, en el suroeste, una escala centrada en la ecología, con la visita a un innovador viñedo orgánico y un viaje al escenario de los incendios forestales del pasado verano.
El viaje vuelve a poner a la monarquía británcia en el foco de atención, tras semanas de titulares sobre la polémica autobiografía del hijo menor de Carlos, el príncipe Enrique, y una docuserie igualmente crítica con la familia real en Netflix.
grb