Tras un mes de haber sido separados por las autoridades de inmigración en la frontera sur de Estados Unidos con México, Arnovis Guidos se reunió hoy con su hija en El Salvador y con ello puso fin a una prolongada incertidumbre sobre su paradero.
Guidos, un pescador de 26 años de edad, y su hija Meybelin, de seis años, llegaron a Estados Unidos de forma ilegal para solicitar asilo por el asedio de las pandillas en el empobrecido país centroamericano, pero ambos fueron arrestados y separados el 27 de mayo por agentes de inmigración.
Como parte de una estrategia para detener el flujo inmigratorio desde México y Centroamérica, el presidente estadunidense, Donald Trump, impulsó una polémica iniciativa de separar a las familias que intentaran ingresar ilegalmente al país.
Guidos, que fue deportado hace una semana a El Salvador sin su hija, estaba angustiado por el paradero y las condiciones en que se encontraba Meybelin, por lo que exigió a las autoridades que le devolvieran a la menor.
"Me siento feliz, contento que voy a volver a ver a mi hija", dijo el padre mientras se frotaba las manos de los nervios y lucía una amplia sonrisa de satisfacción.
Arnovis Guidos fue acompañado por una decena de familiares que emocionados llevaron carteles y globos de colores para darle la bienvenida a la niña que estuvo custodiada en un centro de detención en Phoenix.
Más 2 mil 300 niños inmigrantes fueron separados de sus padres y enviados a diferentes centros de detención en Estados Unidos desde que Trump comenzó la política de "cero tolerancia" a la inmigración ilegal.
Tras la presión internacional y de organismos de derechos humanos, el presidente dio marcha atrás a la medida de separación de las familias.
Padre e hija se abrazaron y lloraron de emoción cuando Meybelin cruzó la puerta de llegada del aeropuerto Monseñor Óscar Arnulfo Romero, ubicado 40 kilómetros al sur de San Salvador.
Cientos de salvadoreños huyen de la pobreza y la violencia de las pandillas rumbo a Estados Unidos en búsqueda de mejores condiciones de vida, pese al endurecimiento de las medidas de seguridad en las fronteras.
Los presidentes del "Triángulo Norte de Centroamérica", conformados por Honduras, Guatemala y El Salvador, se reunieron hoy con el vicepresidente Mike Pence para coordinar acciones que detengan el flujo migratorio hacia Estados Unidos.
JOS