Un fuerte terremoto, que se prolongó al menos 30 segundos, se sintió el martes por la noche en Pakistán y Afganistán, reportaron testigos.
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"La gente salió corriendo de sus casas, Muchos recitaban el Corán", declaró un corresponsal de AFP en la ciudad de Rawalpindi, Pakistán, y otros testimonios similares llegan también de Lahore y Afganistán.
Según el Servicio Sismológico de Estados Unidos, el sismo se registró de forma preliminar en una magnitud de 6.5, a unos 40 kilómetros de Jurm, en Afganistán, una localidad cercana a Pakistán y Tayikistán.
Los residentes de la capital pakistaní Islamabad, salieron corriendo de sus casas a medida que las paredes se mecían y se sentía el temblor en todo el país.
La agencia meteorológica pakistaní indicó que se trató de un sismo magnitud 7.7, según sus datos.
El temblor fue muy profundo, de 194 kilómetros, y tuvo su epicentro en la cordillera del Hindu Kush, cerca de la remota provincia septentrional afgana de Badakhshan.
Una niña de 13 años murió al derrumbarse sobre ella un muro de su casa, y 150 personas resultaron heridas en el distrito de Swat, en el norte de Pakistán, donde los hospitales habían declarado el estado de emergencia, dijo a Reuters el oficial de policía Shafiullah Gandapur.
Shafiullah Rahimi, portavoz del Ministerio de Mitigación de Desastres de Afganistán, dijo que dos personas habían muerto en la provincia oriental de Laghman.
Las autoridades y los trabajadores humanitarios dijeron que se habían sentido sacudidas muy fuertes en Badakhshan y en otras zonas del norte.
Un portavoz de la Cruz Roja dijo que no tenían informes inmediatos de daños en la capital de Badakhshan, pero que estaban haciendo comprobaciones en otras zonas.