Esta mañana, un sismo de magnitud de 5.7 causó daños menores en la isla indonesa de Bali y desató pánico entre los habitantes.
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El terremoto empezó a las 7:18 horas locales en Bali, con un epicentro a 82.1 km al suroeste de la capital de la isla, Denpasar, según el Instituto de Geofísica estadunidense (USGS).
El sismo tuvo lugar en plena temporada turística, varios hoteles fueron evacuados, según medios locales, pero el aeropuerto internacional de Ngurah Rai indicó que los vuelos no se vieron afectados.
“Estábamos desayunando cuando de pronto todo en la habitación se remeció con mucha fuerza”, dijo George Stephen, un australiano de vacaciones en Kuta, Bali. Los clientes salieron del hotel presas del pánico pero regresaron unos 15 minutos después, agregó.
La Agencia Nacional de Desastres publicó en Twitter imágenes que mostraban una casa y una mezquita afectadas en Banyuwangi, en Java Oriental, y un templo hindú con desperfectos en Bali. Un video mostró daños en una ornamentada entrada en Nusa Dua, un enclave de resorts de lujo en Bali.
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El principal hospital de Denpasar evacuó a sus pacientes, algunos de ellos con goteros intravenosos, a los terrenos del centro, de acuerdo con las imágenes de televisión. Numerosas escuelas y hoteles fueron también desalojados.
El temblor, que se sintió hasta en la vecina isla de Java, fue registrado a una profundidad de 91 kilómetros y no provocó alerta de tsunami, ni causó víctimas, según los primeros balances.
Los habitantes de Bali mostaron gran pánico en el momento del terremoto. "Llevaba a mi bebé en el momento de la sacudida. Fue fuerte. Corrí fuera inmediatamente y vi ya a mucha gente en las calles", explicó Komang Sudiani, una vecina de Denpasar.
Imágenes difundidas por la Agencia de Gestión de Desastres mostraban daños menores en los comercios y en los templos de esta isla, de mayoría hindú.
"Hemos recibido informaciones sobre daños como tejas caídas o cristales rotos en varias casas y oficinas", precisó en un comunicado Rahmat Triyono, responsable de la gestión de sismos y tsunamis para la agencia.
En 2004, un fuerte sismo y un tsunami en el océano Índico provocó la muerte de 230 mil personas en una decena de países, la mayoría de ellas ocurridas en Indonesia. Indonesia, tiene una población de más de 260 millones de personas. La isla es propensa a sismos y erupciones volcánicas debido a su ubicación en el Cinturón de Fuego del Pacífico.