Una sesión que se suponía iba a ser seria en el Parlamento de Jordania, pasó a ser una batalla campal entre un grupo de diputados que fueron captados en video repartiéndose insultos, agresiones verbales, empujones y golpes que incluyeron hasta metida de dedos en la nariz en medio de una discusión por esclarecer enmiendas constitucionales sobre igualdad de género.
El enfrentamiento comenzó mientras se debatían ayer unas enmiendas constitucionales propuestas por una comisión encargada por el rey Abdalá II y el presidente de la cámara, Abdul Karim al Doghmi, intentó primero posponer media hora la sesión.
Pero cuando se reanudó volvió a estallar la violencia entre algunos legisladores, por lo que finalmente Al Doghmi se vio obligado a aplazar la sesión hasta hoy.
El debate, según el medio jordano Roya News, se dio luego del ataque verbal que se realizaron el diputado Suleiman Abu Yahya y Abdel Karim Al Dughmi, mientras se buscaba resolver la adhesión de las palabras "mujeres jordanas" en el artículo VI de la ley.
Las palabras han generado polémica en el parlamento, esto porque quienes defiende su establecimiento en la ley afirman que es para preservar los derechos de las mujeres jordanas y no para perjudicarlas o restar sus derechos. Sin embargo, eso no genera consenso, especialmente en las parlamentarias, quienes sí consideran que la frase segrega y establece discriminación de género.
La violencia protagonizada por los diputados ha sido duramente criticada en redes sociales, esto porque las agresiones cubrieron toda una situación que busca dar respuesta a cambios importantes que se pretenden establecer en el país del Medio Oriente.
Abdalá II nombró en junio pasado una comisión para proponer una serie de reformas con vistas a "modernizar el sistema político" de Jordania, incluidas enmiendas a la ley electoral, la ley de partidos políticos y la Constitución.
Una vez presentadas esas propuestas, el monarca pidió al gobierno que las adoptara en forma de propuestas de ley para ser sometidas al Parlamento y, en los últimos seis meses, las medidas habían sido sometidas a discusión entre el público y la clase política.
OMZI