Los obispos católicos de Canadá se han disculpado formalmente con los pueblos indígenas del país después de que en los últimos meses se descubrieran más de mil tumbas cerca de antiguos internados gestionados por la Iglesia, según una declaración publicada el viernes.
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"Nosotros, los obispos católicos de Canadá, expresamos nuestro profundo remordimiento y ofrecemos una disculpa inequívoca", dijeron. También reconocieron "el sufrimiento vivido en los internados" y los "graves abusos cometidos por algunos miembros" de la comunidad católica.
Aseguraron que, como parte del compromiso de la conferencia de abordar su papel en el genocidio cultural de los pueblos indígenas en Canadá, recaudará fondos en todo el país para apoyar a los grupos indígenas regionales con proyectos definidos a nivel local y hacer un esfuerzo por escucharlos, incluidos los supervivientes de las escuelas residenciales, con el fin de "educar a nuestro clero".
"Reconocemos los graves abusos cometidos por algunos miembros de nuestra comunidad católica; físicos, psicológicos, emocionales, espirituales, culturales y sexuales. Muchas comunidades religiosas católicas y diócesis participaron en este sistema, que llevó a la supresión de las lenguas, la cultura y la espiritualidad indígenas, sin respetar la rica historia, tradiciones y sabiduría de los pueblos indígenas", dice el comunicado.
Desde principios de año, varias comunidades indígenas de todo el país han informado de que se han localizado cientos de tumbas sin identificar en los sitios de las antiguas escuelas residenciales. La Iglesia Católica aseguró en su momento que haría su parte para ayudar a localizar más tumbas sin marcar en las escuelas residenciales.
dmr