La Ley General de Economía Circular debe de “descongelarse” y convertirse en una prioridad del actual gobierno de México para transitar de un modelo económico lineal basado en “tomar-hacer y desechar” a uno en el que los residuos sean reutilizables, no terminen contaminando los tiraderos y contribuyan a generar energía, aseguró Gabriel Quadri de la Torre, político, ecologista liberal e investigador.
“Plantea una serie de principios, de reglas, de procedimientos, que tienden a cerrar los circuitos de la economía circular, pero insisto, hace falta son incentivos fiscales, económicos y en algunos casos, regulaciones del gobierno.
“Por ejemplo, es fundamental que todos los envases , empaques, embalajes, estén sujetos a un proceso, como por ejemplo, el punto verde alemán, donde las empresas que son productoras de bienes de consumo, financien el acopio, la recolección, la selección, el reciclaje de todos sus empaques y embalajes para evitar que vayan a dar a los tiraderos y cuando eso no es posible porque es anti-económico, o material o físicamente imposible como ya lo dije, deben destinarse a procesos de termovalorización para la generación de energía”, explicó.
Quadri de la Torre, quien participó en MILENIO Foros “De lineal a circular. Por el bien de todos”, aseguró que es viable tanto técnicamente como financieramente transitar de una economía lineal a una circular en el país.
“Yo creo que debe haber presión externa para que en esta legislatura apruebe la Ley de Economía Circular, aunque el problema es que para el gobierno actual, los temas ambientales le tienen sin cuidado, no son prioridad y actúan de una forma totalmente contraria a los intereses ambientales en el país”, aseveró.
Para lograr que México transite a una economía circular es preciso, comentó, un marco de políticas públicas, de regulaciones y de incentivos financieros, fiscales, a las empresas.
“Hay que obligar a las empresas de productos de consumo, a responsabilizarse, a hacerse cargo de todo el acopio, recolección, separación, del reciclaje de sus empaques y envases y, aquellos empaques y envases que no pueden ser reciclados, simplemente se cambien, utilicen otros que sean más factibles de reuso”, aclaró.
“No es imposible ya que todos los procesos de economía circular o parte de estos son rentables, entonces en ese momento, las empresas pueden asumirlos y desarrollarlos”.
El ex candidato presidencial del partido Nueva Alianza y actual diputado federal aclaró que “los procesos de economía circular deben de ser rentables; cuando no son rentables, cuando no son redituables, entonces es preciso que haya incentivos de parte del gobierno en un contexto de política pública para hacerlos redituables y de esta manera se puedan llevar a cabo.
“Cada proceso es distinto, cada material es distinto, cada economía es diferente en cada país. Entonces no es fácil hacer una comparación. Lo que sí es cierto, e insisto, es que la economía circular requiere, regulaciones, mercados y nuevos arreglos institucionales para que se pueda concretar”.
Quadri de la Torre comentó que hay ejemplos de avances importantes, como sucede con la Industria Cementera, que utiliza volúmenes muy importantes de residuos para generar energía.
Y las latas de aluminio también se reciclan al 100 por ciento porque vale mucho el aluminio.
“Hay muchos productos que utilizan en empaques y embalajes con muchas materias y que no son aptos para reciclaje, por ejemplo, los metalizados. Entonces las empresas tienen que pagar y no pueden transferir el costo a los municipios en términos de la recolección, de acopio y disposición final del relleno sanitario”.
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