La pregunta fue directa ¿Nuevo León está exento de sufrir una nueva crisis por desabasto de agua? Y la respuesta contundente es que se trata de un problema aún sin resolver y puede volver a presentarse en un futuro muy cercano: “Si las lluvias no son abundantes, pues vamos a tener, probablemente, restringido el abastecimiento el año próximo”, declaró Juan Ignacio Barragán, director general del Servicio de Agua y Drenaje de Monterrey.
El actual verano “ya tenemos calculado el abastecimiento que tenemos en presas y en acuíferos”, de manera que “no tenemos una problemática de corto plazo en puertas”, dijo el funcionario local en MilenioForos, con el tema Agua en Nuevo León: Retos y soluciones para un futuro sostenible, conducido por Víctor Martínez.
- Te recomendamos Ciudad Victoria, a contrarreloj en busca de abasto de agua potable Comunidad
Sin embargo, aclaró Barragán, “hay que ver en el futuro y, para eso, la clave de solución, definitivamente, es el abastecimiento que tendremos de la Presa El Cuchillo con el segundo acueducto, ya con eso, que muy pronto estará en operación, tendríamos resuelto no solo en el corto, sino el mediano y largo plazo” (sistema que transportará líquido continuo en el orden de 5 mil litros por segundo para resolver la sequía en la Zona Metropolitana de Monterrey).
Raúl Rodríguez, presidente del Consejo Consultivo del Agua AC (CCA) coincidió con Juan Ignacio Barragán en que “tenemos una precipitación pluvial menor a la del año pasado; Conagua dice que tendremos un 24% menos de precipitaciones, que no son suficientes, tenemos que tomar acciones específicas” y sobre todo aprender de los sucedió en Nuevo León, muy cerca “del Día cero” para enfrentar el problema porque ya no solo es de una entidad, es nacional y se está viendo en el Sistema Cutzamala que abastece a millones de mexicanos.
Luego de que Iris Neri Flores, doctora en ciencias de la tierra de la UNAM detallara que México se enfrenta a extremos en el que puede tener, en un mismo año, sequías, lluvias e inundaciones, Horacio Martínez Reyes, director del Instituto para la Protección Ambiental de Nuevo León consideró que “gestionar nuestros recursos de una manera sostenible” contribuirá a satisfacer las necesidades de una creciente población.
El reto es entregar a la población de la entidad agua de uso urbano diario, lo que equivaldría a llenar alrededor de 600 albercas olímpicas. “Es muy probable que, para el 2050, crucemos la marca de 10 millones de personas”.
En el sector industrial de Nuevo León, explicó basándose en datos de Conagua, “no es un consumidor significativo, con apenas 4% del total del agua del estado; sin embargo, tenemos un papel importante de conservación, de eficiencias, de aumentar las reservas líquidas” y citó cinco líneas de acción, entre estas, procesos más eficientes, tratamiento de aguas residuales, el cumplimiento de regulaciones, investigación y desarrollo no solo en la construcción de plantas de tratamiento, sino también de educación y sensibilización de las acciones de la industria y mejorar la cultura del agua en la comunidad.
En Milenio Foros, Raúl Rodríguez, presidente del Consejo Consultivo del Agua AC (CCA) dejó en claro que, para dar certeza al abastecimiento de agua, es esencial contar con un presupuesto de egresos de la federación donde se otorguen mayores recursos financieros a la infraestructura hídrica y mantenimiento, porque “son insuficientes”.
“Hay un problema grave en las fugas en las redes de conducción de más del 45% a nivel nacional”, añadió Rodríguez.
Pero en este proceso, opinó Juan Ignacio Barragán, director general del Servicio de Agua y Drenaje de Monterrey, también debe participar la población: “Tenemos agua, sí y solo sí, si la cuidamos; si la desperdiciamos, entonces, se nos va a acabar”.
- Te recomendamos En Cancún, manifestantes bloquean instalaciones de concesionaria Aguakan ante falta de suministro Estados
Al respecto, Iris Neri Flores, doctora en ciencias de la tierra de la UNAM también dejó en claro que “la perforación de pozos” debe de hacerse en situaciones de emergencia durante las catástrofes naturales.
Sobre la importancia de renegociar los acuerdos nacionales, Raúl Rodríguez, presidente del Consejo Consultivo del Agua AC (CCA) comentó debe de revisarse “el tratado de 1944 entre Estados Unidos y México respecto a las aguas internacionales a través del CILA, que es la Comisión Internacional de Límites y Aguas” y el cual establece la asignación de aguas de los ríos Bravo y Colorado.
“Vemos con tristeza cómo han bajado los caudales de ambos ríos” sobre todo porque son causas de “conflictos sociales” y ahora, 79 años después, las circunstancias son distintas.
Los panelistas coincidieron que el agua no está distribuida de manera equitativa y se requiere de la colaboración de todos los sectores para buscar soluciones y que a través de tecnologías innovadoras se podrá enfrentar el problema de abasto.
aag