De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) en México los adultos mayores en pobreza extrema representan más de 60 por ciento y quienes reciben pensiones menores a tres salarios mínimos representan 90 por ciento. Sólo hay un grupo privilegiado de los adultos mayores, 1.5 por ciento, reciben una jubilación digna.
“Ese 1.5 por ciento (67 mil 500 personas) de los 4.5 millones de pensionados del seguro social, reciben el tope máximo de cotización que es de 25 UMA’s, es decir, el equivalente a 73 mil 127.75 pesos mensuales, los cuales les permite vivir en mejores condiciones. Ese grupo cotizó al IMSS por 30 años o más y en los últimos 5 años previos a la jubilación tuvieron un sueldo de más de 25 UMA’s”, detalló Marcela Flores Quiroz, presidenta de Lockton México y líder de beneficios de empleados para América Latina.
El año pasado se jubilaron poco más de 450 mil personas, de las cuales más de 90 por ciento (405 mil personas) recibió pensiones menores a dos salarios mínimos. De esos 450 mil jubilados alrededor de 20 por ciento son del Estado de México, es decir, 90 mil personas.
Aprovechar planes privados
En entrevista con MILENIO Edomex, Marcela Flores resaltó que hoy los adultos mayores no solo no llegan con fondos a su retiro, sino con deudas, por ello los trabajadores deben aprovechar los mecanismos existentes para generar planes privados de retiro.
La empresa puede ser el facilitador para que el empleado pueda ahorrar 2 o 3 por ciento de su salario, es decir, si gana 10 mil pesos al mes puede ahorrar de inicio 200 pesos y después ir aumentando la cantidad, para después depositarlo en Fideicomisos, planes de inversión o seguros para que obtengan rendimientos positivos por arriba de la inflación. Al final no son recursos de las empresas sino ahorros del empleado.
“Lo ideal sería que una persona ahorre 15 por ciento de su salario, no importa lo que gane. A veces ese 15 por ciento es un monto muy alto porque las personas no tienen más posibilidades, sin embargo, se trata de un tema de cultura, pues quién gana mucho gasta mucho y quién gana poco también gasta mucho; lo importante es ahorrar sin lastimar el ingreso de forma gravosa”.
Grandes empresas ofrecen beneficios
Si bien las personas pueden abrir una cuenta en un banco con un monto pequeño, a veces no conviene porque lo que cobran las instituciones o los instrumentos de inversión, se comen los rendimientos, pero cuando hay una empresa facilitadora se puede optimizar la tasa de rendimiento de esos pesos.
“A la fecha menos de 10 por ciento de la población se preocupa por ahorrar en lo individual, el ahorro en México es muy bajo. Las empresas pueden apoyar a sus empleados a que conozcan a detalle cuánto tienen en su Afore, cuál es la mejor manera de administrarla, conozcan sus derechos y obligaciones, para que no tengan una vejez precaria”.
En estos momentos solo las grandes empresas tienen algún plan privado de pensiones, y en el registro de la Consar son muy pocas. “Hoy hay millas para el retiro donde el empleado puede ahorrar cuando consume y puede mandar algo a su Afore en cantidades nones”.
Regresar préstamos de Afores
Con la pandemia muchos adultos mayores o personas en general se quedaron sin empleo se vieron obligados a retirar dinero de su Afore y perdieron semanas de cotización. Por ello lo más importante es regresar esa cantidad en cuanto les sea posible para optimizar el monto que van recibir cuando se jubilen y no pierdan derechos de cotización y servicios médicos.
“Cuando no se tiene acceso a seguridad social, los seguros privados son prácticamente imposibles de pagar para los adultos mayores y ante el nivel de pensión que reciben, tendrían que usarla toda para pagar salud privado y así no les alcanzaría”.
Se estima que en 10 años la mitad de la población del mundo serán adultos mayores y en México serán 25 por ciento, por ello hay que reeducar a la población joven para que no tenga la misma suerte.
KVS