De aprobarse el paquete económico 2024 en los términos en que lo envió el Ejecutivo federal, entre 2018 a 2024 se habrán destinado un billón 506 mil 415 millones de pesos a las obras prioritarias del presidente Andrés Manuel López Obrador, siendo la refinería Olmeca y el Tren Maya los que absorbieron 90 por ciento de este capital, expuso el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
De acuerdo con un estudio realizado por ese grupo de especialistas, el proyecto de Dos Bocas, Tabasco, es el que más capital absorberá durante este sexenio, con 55.9 por ciento del total.
Destacó que el año en que se destinó más presupuesto a esta obra fue en 2021, cuando obtuvo 30.1 por ciento de 410 mil 532 millones de pesos, que fue el gasto total que se dio como inversión pública para proyectos prioritarios.
“Es necesario ir pensando en la construcción de una nueva refinería; desde luego, seguir invirtiendo en energías renovables; a ver si es posible empezar a rehabilitar toda la industria petroquímica”, expuso el mandatario en Palacio Nacional en conferencia de mediados de agosto.
Posterior al proyecto de Dos Bocas está el Tren Maya, con un total de 514 mil 217 millones de pesos al 2024; este monto significa 34.1 por ciento del total destinado a infraestructura prioritaria durante el sexenio.
“Con el Tren Maya y los proyectos que generamos en torno a él estamos cambiando la vida de la gente y devolviéndole al pueblo sus legítimos derechos de bienestar con una participación mucho más justa, mucha más equitativa del éxito turístico”, explicó en conferencia Mara Lezama, gobernadora de Quintana Roo.
Respecto a otros proyectos que impulsó la administración del presidente López Obrador, el CIEP expuso que el Tren Interurbano México-Toluca concentró 2.4 por ciento del gasto y el Corredor del Istmo de Tehuantepec 2.3 por ciento.
Sobre este último, el mandatario señaló el pasado viernes que el todo el Istmo se considera una zona estratégica “de seguridad nacional”, pues además será importante para la atracción de inversiones y el desarrollo regional.
“Ya van a empezar a moverse los trenes de carga. Ya está por otorgarse la concesión para el manejo de los dos puertos, Salina Cruz y Coatzacoalcos, a una empresa operadora. Ya se están licitando los polos de desarrollo en todo el Istmo, creo que cinco”, expuso el Presidente.
Pendientes
Aun con los avances que se tuvieron en infraestructura con las megaobras, especialistas consideran que hay oportunidades de crecimiento en otros desarrollos que aún quedan pendientes para la administración federal como el sector hidráulico, energético y vivienda.
El presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Francisco Solares, expuso que un ejemplo son las obras para transporte de agua.
Explicó que a pesar de las inversiones realizadas en proyectos como fue el segundo acueducto El Cuchillo, en Monterrey, existe un rezago al respecto, ya que el desembolso de recursos es lento ante el elevado incremento poblacional de las ciudades en el país.
“Se debe hacer una mayor inyección de capital al respecto para hacer frente al crecimiento de la mancha urbana y sus necesidades de agua”, comentó.
Remarcó que el presupuesto establecido por el gobierno federal “no es suficiente”, exponiendo que durante la presente administración los recursos se concentraron mucho en el sur-sureste del país, por lo que hay oportunidad de infraestructura en el resto de la nación.
Mientras que Miguel Labardini, socio de la consultora Marcos y Asociados, Infraestructura y Energía, explicó que se necesita la construcción de unidades de almacenamiento de combustible, ya que el inventario actual no es suficiente para el mercado.
“En México se tiene una capacidad de guardar gasolina y otros productos similares por tres días, cuando en Estados Unidos es de 90 días”, explicó el especialista.
Por su parte, el socio director de Softec, Gene Towle, afirmó que en los cincos años de la presente administración persiste un decrecimiento en la oferta de vivienda media y de interés social.