Para soportar el crecimiento de los operadores móviles virtuales (OMV) y por ser una empresa público–privada, Altán Redes, empresa mexicana que opera la Red Compartida, busca poder soportar a través del concurso mercantil las deudas que presenta con todos sus acreedores, lo que no significa que esté en quiebra, aseguró la consultora especializada The Competitive Intelligence Unit (The CIU).
Ernesto Piedras, director general de The CIU, mencionó que debido a la naturaleza de la empresa, ésta no puede obtener recursos a través de herramientas bursátiles, por lo que un mecanismo más accesible es el concurso mercantil.
La semana pasada, el Juzgado Séptimo de Distrito en Materia Civil recibió información financiera por parte de Altán Redes para poder desahogar todos elementos que requiere la empresa y con ello, entrar a concurso mercantil.
La compañía, que inició operaciones en 2018, cuenta con un adeudo de 17 mil millones de pesos. Con la reestructuración financiera, la empresa tiene como objetivo liberar la presión que tiene con sus acreedores y conectar a 92.2 por ciento de los mexicanos para 2024.
“Su segmento va muy bien; lo que hagan en sus estructuras financieras y estrategias de expansión se deben considerar en paralelo pero no está quebrando en la red en la que esta”, señaló Piedras en conferencia para presentar los resultados del sector de telecomunicaciones.
AMP