El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que el Producto Interno Bruto (PIB) del país se estancó y no registró variación en el segundo trimestre del año, ajustando a la baja su reporte previo pero evitando la "recesión técnica" que anticipaban algunos analistas.
En su lectura preliminar, dada a conocer en julio, el Inegi había reportado un crecimiento de 0.1 por ciento frente al trimestre anterior, cifra que ajustó a 0.0 por ciento, algo que no preocupó mucho al presidente, Andrés Manuel López Obrador.
“Crecer puede ser que beneficie a un pequeño grupo, pero ahora se está creciendo y hay más y mejor distribución del ingreso; abajo, la gente tiene más capacidad de compra, más poder adquisitivo, la mayoría de los mexicanos, por eso no me preocupa mucho el asunto”, dijo durante su conferencia matutina desde Villahermosa, Tabasco.
Tras el resultado, el área de Análisis Económico de Grupo Financiero Banorte señaló que pese al estancamiento de la economía, el reporte confirmó que se evitaron dos trimestres consecutivos en contracción, conocido como una recesión técnica.
“En términos generales, el reporte confirma que la economía se ha desacelerado de manera significativa y se encuentra en una posición más débil al menos desde el cuatro trimestre de 2018”, señala el reporte y destaca que la actividad industrial continúa como el eslabón más débil.
El resultado del segundo trimestre hizo que el promedio de crecimiento para la primera mitad del año fuera de 0.2 por ciento reales en comparación con el mismo periodo del año previo, su menor avance tras la crisis de 2008-2009, señaló Grupo Financiero Ve por Más.
Pese a esto, López Obrador insistió en mantener su perspectiva de crecimiento de 2.0 por ciento para este año.
“A nosotros sí nos importa el crecimiento, pero nos importa más el desarrollo porque, repito, crecer es crear riqueza y el desarrollo es crear riqueza y distribuir la riqueza. Entonces, siento —por todo lo que estamos haciendo— que hay una mejor distribución de la riqueza y por eso hay desarrollo y hay bienestar”, reiteró.
Ve por Más consideró que el crecimiento económico podría presentar un ligero rebote en el segundo semestre de este año, sujeto a la normalización del gasto público, estabilidad en el consumo privado y que sigan creciendo las exportaciones.
El Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) de junio, también publicado ayer, cayó 0.9 por ciento anual con cifras originales. “En nuestra opinión este resultado fue débil, consistente con otros datos que aluden a un peor desempeño de la demanda doméstica”, dijo Banorte.
El presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), Enoch Castellanos, responsabilizó al gobierno del bajo crecimiento, por lo que pidió políticas públicas que ayuden al crecimiento, a restablecer la confianza y a atraer inversiones al país.
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SUPERÁVIT RÉCORD
México obtuvo en el segundo trimestre un superávit de 5 mil 143 millones de dólares en su cuenta corriente, el mayor desde que iniciaron los registros en 1980, favorecido por mayores exportaciones y captación de remesas, así como por una baja en las importaciones, mostraron datos del Banco de México. Las exportaciones en el periodo fueron de 119 mil 222 mdd mientras que las importaciones sumaron 114 mil 260 mdd. “Hay una caída muy fuerte de las importaciones no petroleras y básicamente eso es lo que explica que haya un superávit”, dijo Benito Berber, economista en jefe para América Latina en Natixis.
Con información de C. Ochoa y E. Castillo.