El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que México no tendrá recesión en 2023 tal como lo pronosticó Moody's Analitics.
En la conferencia mañanera de Palacio Nacional, desestimó este tipo de mediciones porque son modelos que van de la mano de la política neoliberal por lo que ya están "en franca decadencia".
"En México no, nosotros no vamos a tener problemas, ya enfrentamos lo más difícil, lo más doloroso, el daño que causó la pandemia y esto lo vamos a ir enfrentando, inflación, buscando que no se pierda poder de compra, poder adquisitivo en las familias", dijo.
López Obrador insistió en que las calificadoras se siguen aferrando a las mismas condiciones del pasado aun cuando hay una crisis de la política económica mundial.
Consideró que debe tomarse en cuenta que la inflación, por ejemplo, es resultado de la decadencia productiva porque se dejó de producir lo que consume cada país.
“Esas fórmulas de pensar que la inflación se resuelve parando la economía, si se dan cuenta en todos lados la misma receta, hay inflación, suben las tasas de interés para enfriar la economía, paran la economía pues sí puede ser y ojalá así se logre bajar la inflación, pero y los efectos secundarios, qué significa parar la economía pues que no haya crecimiento, no haya empleos, no hay bienestar”
En el documento “La próxima recesión global”, la agencia calificadora Moody's Analytics estimó que la economía mexicana caerá en recesión en el segundo trimestre de 2023 que tendrá una duración de tres trimestres y estará acompañada de una prolongada inflación, debido a la contracción económica que tendrá Estados Unidos, en medio de una recesión global.
Según la institución, la contracción económica se extenderá desde el segundo trimestre hasta el cuarto, cuando la economía tocará fondo; en consecuencia, el Producto Interno Bruto (PIB) caerá 1.7 por ciento en 2023, después de crecer 1.8 por ciento en 2022.
MRA