El gobierno de Andrés Manuel López Obrador revivirá el proyecto del aeropuerto de Tulum, una obra que fue planeada desde la administración de Felipe Calderón y que había quedado en el olvido, tras varias disputas legales.
El presidente estimó que el aeropuerto de Tulum, en Quintana Roo, se inaugurará en 2023, un proyecto del cual ya se tienen dos terrenos, uno de ellos con una extensión de mil 500 hectáreas, además de que será construido por el Ejército.
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"Vamos a comenzar yo creo que a principios del año próximo ya a trabajar, porque lo vamos a inaugurar en el 2023", expresó.
En La Mañanera desde Palacio Nacional, detalló que existen dos predios para la construcción de este aeropuerto, uno de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y otro de la Secretaría de Marina.
Precisó que el aeropuerto de Tulum no pretende competir con el aeropuerto que opera en Cancún, debido a que "da para los dos. Da para que Cancún siga teniendo mucha afluencia. Llegan muchos turistas y al mismo tiempo ayuda el que se tenga el de Tulum, una de las regiones más bellas del mundo".
En 2010, el gobierno de Felipe Calderón anunció la construcción del aeropuerto de Riviera Maya, que ocuparía un predio de mil 500 hectáreas en el municipio de Tulum y para el cual se requeriría una inversión aproximada de 3 mil 200 millones de pesos.
El entonces mandatario federal señaló que este complejo aéreo se realizaría bajo la figura de concesión, es decir, que una empresa privada lo construiría y operaría en el futuro.
De acuerdo con estimaciones de la autoridad este nuevo aeropuerto de Riviera Maya tendría capacidad para recibir aproximadamente 3 millones de pasajeros nacionales e internacionales cada año.
En el momento que el gobierno federal lanzó la licitación para este complejo aéreo fueron tres las empresas interesadas en participar, que fueron Tradeco, Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP) junto con Grupo México y Grupo Aeroportuario del Sureste (Asur).
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Sin embargo, la entonces Comisión Federal de Competencia (CFC) decidió que Asur no podría participar en el concurso, ya que, al ser el operador del aeropuerto de Cancún, se podría dar una concentración excesiva en el mercado de los servicios aeroportuarios en la región.
Tras esta decisión solo Tradeco y GAP junto con Grupo México fueron los únicos participantes para el proyecto.
Después de una evaluación, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) declaró desierta la licitación en 2011 debido a que las propuestas presentadas no cumplieron con todos los requerimientos establecidos y tenían inconsistencias jurídicas.
La dependencia informó que revisaría los hechos para posteriormente lanzar una nueva licitación para la edificación del aeropuerto de Riviera Maya.
Sin embargo, Grupo México quien participó junto con GAP, decidió apelar ante juzgados la decisión del gobierno de declarar desierta la licitación, ya que a su consideración cumplía con los requisitos económicos y técnicos.
“Grupo México lamenta la decisión de la SCT, principalmente por no estar basada en alguna razón sólida, relevante y verdadera, y se encuentra en la obligación fiduciaria de impugnar la decisión”, dijo la empresa en su momento.
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Tras los pleitos legales, la administración de Felipe Calderón no volvió a retomar el concurso.
En el gobierno de Enrique Peña Nieto, el titular de la SCT, Gerardo Ruiz Esparza, señaló que evaluarían retomar la licitación del aeropuerto de Riviera Maya; sin embargo, el hecho nunca se consumó.
Por otra parte, el presidente López Obrador sostuvo que además en la región operará el Tren Maya, por lo que integrará todo un desarrollo para el sureste del país.
El presidente adelantó que el fin de semana realizará una gira de trabajo “para supervisar también la construcción del Tren Maya. Voy a todos los tramos, voy a Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo. Quiero ir a la presa Peñitas, porque vamos a tomar decisiones ya para que ya nunca más se vuelva a inundar la planicie de Tabasco”, anunció.
lvm