El imponer aranceles como pretende realizar el presidente de Estados Unidos, Donald Trump a México de 5 por ciento en las exportaciones, en nada resuelve el tema migratorio al contrario, lo empeoraría, aseguró la socia en Baker McKenzie y experta en Comercio Exterior, Adriana Ibarra.
En entrevista con MILENIO, Ibarra puso como ejemplo una maquiladora en Reynosa donde se tienen mil empleados, que al encarecer sus productos en el mercado de Estados Unidos por los aranceles, tiene que despedir a la mitad de sus trabajadores y estos a su vez se moverían al país vecino.
“Entonces no se está atacando el problema, y tal vez lo están haciendo más agudo, además de que se le está encareciendo los productos a los consumidores, están afectando a las empresas que tienen producción en México y que usan esos insumos. No es una solución a ningún tema, pero es una medida de presión”, aseveró.
Expuso que México debe responder con aranceles a EU, “el tema más grande es que no podemos mandar el mensaje que estamos dispuestos a permitir que EU viole sus obligaciones, y nosotros no hacer nada, no nos podemos quedar así, pero lo ideal es que separen el tema migratorio del comercial”.
El ex jefe de la Negociación Técnica para el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), Kenneth Smith dijo que el efecto sería tan grande en los sectores productivos que debe actuarse de inmediato.
“El golpe sería tan grande que México debería reaccionar de manera inmediata, argumentar que hay una violación directa del TLCAN en materia de acceso a mercados, porque no se pueden incrementar los aranceles ya negociados”, resaltó.
Indicó que si se imponen los aranceles es una situación perder-perder, “México debe reaccionar inmediatamente con una lista de represalias para mandar una señal contundente a EU y debe hacerlo de tal manera de que se dé un golpe duro, pero sin lastimar las cadenas productivas de México o al consumidor en la canasta básica”.
MRA