Aunque el efecto será menor, el aumento al salario mínimo de 20 por ciento en 2020 sí tendrá un impacto en la inflación, pues implicará presión para los salarios contractuales (aquellos que negocian las empresas con los sindicatos) y eso impactará en costos para las compañías, alertó el Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMPC).
En conferencia con medios, el presidente de la Comisión de Análisis Económico del IMCP, Ernesto O’Farril, explicó que se ha hecho un esfuerzo importante por desindexar a la economía del salario mínimo, pues antes al estar ligado a éste, había una serie de implicaciones en el conjunto de la economía, pero los aumentos de 2019 no tuvieron implicaciones inflacionarias.
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Sin embargo, abundó, “este nuevo incremento que se está determinando, de 20 por ciento, nos parece que sí puede inducir a una presión de los salarios contractuales, pero no de la misma proporción, no vemos que las negociaciones en general vayan a incrementar los salarios 20 por ciento, pero quizá un 5 por ciento y, en esa medida, puede generar un incremento de costos en las empresas y, a su vez, las empresas pueden sacrificar en su margen algo de ese incremento en sus costos, por lo que el efecto inflacionario debería ser menor”, expuso.
Confianza económica volvió a debilitarse
Después de haber mejorado en octubre, en noviembre pasado, el Índice Mexicano de Confianza Económica volvió a debilitarse, con lo que tocó una vez más un mínimo de toda la serie.
De acuerdo con el IMCP, el indicador registró una lectura de 64.89 puntos, 1.78 menos que en octubre y por detrás del frágil nivel de 64.04 puntos observado en septiembre, debido a un menor optimismo tanto en la situación actual, como en la futura.
El subíndice de la situación actual se ubicó en el segundo nivel más débil de todo 2019 y el componente de la situación futura marcó en nivel más bajo que se tiene registrado.
GGA