UE y Reino Unido acuerdan intensificar negociación para tener pacto en 2020

Las conversaciones sobre la relación tras el Brexit permanecen estancadas y con escasos avances tras celebrarse cuatro rondas de negociación desde marzo.

Comisión Europea. (@vonderleyen)
Editorial Milenio
Bruselas /

La Unión Europea y el Reino Unido acordaron intensificar las negociaciones sobre su relación luego de llevarse a cabo el Brexit, con el fin de lograr un pacto antes de que se termine este año, esto luego de que Londres rechazara extender la transición en la que se negocian los nuevos vínculos después del 31 de diciembre de 2020.

El club comunitario y el gobierno británico respaldaron acelerar las estancadas negociaciones durante una reunión de alto nivel en la que participaron la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, así como los líderes del Consejo Europeo, Charles Michel, y de la Eurocámara, David Sassoli.

"Las partes acordaron que se necesita un nuevo impulso. Apoyaron los planes acordados por los jefes negociadores para intensificar las conversaciones en julio y crear las condiciones más propicias para concluir y ratificar un acuerdo antes del final de 2020", aseguraron Londres y Bruselas en un comunicado conjunto tras la videoconferencia, que comenzó en torno a las 14:30 (12.30 GMT) y se prolongó durante poco más de una hora.

Añadieron que la intensificación del diálogo debería incluir, "si es posible", lograr un "pronto entendimiento" sobre los principios en los que se basaría el acuerdo sobre la futura relación.

Las conversaciones sobre la relación del Reino Unido y la Unión Europea tras el Brexit permanecen estancadas y con escasos avances tras celebrarse cuatro rondas de negociación desde marzo, las tres últimas por videconferencia debido a la pandemia de coronavirus.

Sin embargo, el Reino Unido rechaza extender la transición, en la que se busca fijar los nuevos vínculos más allá del próximo 31 de diciembre, si bien puede solicitar antes del 1 de julio una prórroga de uno o dos años, hasta finales de 2021 o 2022.

La semana pasada, Londres reiteró a Bruselas su negativa a prolongar esa transición, que comenzó tras la retirada británica de la Unión Europea el pasado 31 de enero y durante la cual se sigue aplicando la legislación comunitaria en el Reino Unido.

"He confirmado formalmente que el Reino Unido no prolongará el periodo de transición y que el momento de la extensión ahora ha pasado", escribió el viernes en Twitter el ministro británico del Gabinete, Michael Gove, tras la segunda reunión del comité conjunto del club comunitario y el Reino Unido encargado de supervisar la implementación del acuerdo de retirada.

Bruselas también consideró definitivo el rechazo a una prórroga, puesto que se expresó en la última reunión del comité antes de que expire el plazo para pedir la prolongación a final de mes. El comité conjunto, el organismo encargado de aprobar esa hipotética extensión, se volverá a reunir a principios de septiembre.

Así, la transición parece abocada a concluir once meses después de la salida del Reino Unido de la Unión Europea.

Ante el ajustado calendario, los Veintisiete y el Reino Unido decidieron la semana pasada intensificar las negociaciones, una medida a la que dieron su visto bueno los líderes comunitarios y británico hoy.

La Unión Europea y el Reino Unido tienen previsto mantener reuniones presenciales para negociar, ya sean rondas completas o citas más reducidas, todas las semanas desde el 29 de junio hasta la que comienza el 27 de julio en Bruselas o Londres. En agosto, se espera una ronda negociadora en la capital belga entre los días 17 y 21.

Dada la falta de progreso hasta el momento, el negociador comunitario, Michel Barnier, constató a principios de mes que no se puede "seguir eternamente así, más aún cuando los británicos rechazan extender el periodo de transición".

Además, criticó a Londres por dar "marcha atrás" en los compromisos que había asumido en la declaración política sobre la futura relación, un documento que acompaña al acuerdo de retirada y fija las líneas generales sobre los nuevos vínculos entre la Unión Europea y el Reino Unido, que deben concretarse en la negociación actual.

Para Barnier, si no se prolonga la transición, el nuevo pacto deberá estar concluido el 31 de octubre como muy tarde, puesto que después se debe ratificar.

Las posiciones de Londres y Bruselas siguen muy alejadas en asuntos fundamentales como las garantías para mantener una competencia justa o las cuotas pesqueras.

En la videoconferencia de este lunes, se repasó el estado de las negociaciones y se "tomó nota" de la decisión británica de no prolongar la transición.

En Twitter, Charles Michel añadió tras la videoconferencia que los países de la Unión Europea "nunca aceptarán un acuerdo (sobre la futura relación) que vaya en contra de los intereses de la Unión".

​kga

LAS MÁS VISTAS