Ante la intención proteccionista que ha surgido en los Estados Unidos contra las exportaciones de acero mexicano, México está en su derecho de hacer uso de “medidas espejo” como un mecanismo de defensa, esto en dado caso que prospere esa pretensión, consideró Juan Antonio Reboulen Bernal, presidente de la Comisión de comunicación y vinculación política de Canacero.
En entrevista para Telediario Radio, con el periodista Víctor Martínez, el también director de asuntos corporativos y comercio internacional de Deacero dijo que si el país avanza podría imponerlas.
“No convendría a nadie imponer las medidas espejo, pero si esto avanza, México tendría el derecho de imponerlas”, indicó en entrevista.
Agregó que esta intención proteccionista se da en el marco de un año político-electoral en Estados Unidos.
“Esto hay que ubicarlo en el contexto de carácter político-electoral de Estados Unidos, dado que es un año electoral importante, por ello se han dado medidas proteccionistas en ciertos productos y ese es el caso de unos 13 senadores de Estados Unidos que hace unos días pidieron al gobierno imponer medidas arancelarias en contra del acero mexicano”.
Explicó que los senadores que piden imponer aranceles al acero mexicano argumentan que las exportaciones mexicanas de acero han crecido de manera súbita.
“Efectivamente nuestras exportaciones a los Estados Unidos han venido creciendo, pero hay que entender en qué contexto. Primeramente hay una demanda de acero (los Estados Unidos) están usando su capacidad instalada casi a la totalidad y las importaciones de acero que ellos hacían han venido bajando, por el tema de la guerra comercial”.
Entonces, expuso, México ha aprovechado esa oportunidad y ha crecido sus exportaciones para ganar terreno, pero sobre todo no frente a los productores americanos, sino a aquellos asiáticos que han venido disminuyendo.
Por ejemplo, en el 2017, países como Turquía y Japón enviaban a los Estados Unidos cerca de 1.6 millones de toneladas de productos de acero al año, y México exportaba medio millón de toneladas al año, pero al cierre de 2022 esos dos países exportaban ya solo 860 mil toneladas y México exportó un millón de toneladas.
Lo anterior, comentó, significa que México sustituyó el volumen de esos orígenes (Turquía y Japón), e incluso lo que se manda es menos de lo que esos 2 países mandaban a Estados Unidos.
Rebouren mencionó que una tercera razón tiene que ver con lo competitivo que es el acero mexicano.
“El acero mexicano es muy competitivo en cuanto a calidad y en términos sustentables, la huella de carbón es menos a la media internacional y el mercado lo demanda”.
Reconoció que se han incrementado las exportaciones, pero también hay que tener en cuenta que la balanza comercial del acero entre Estados Unidos y México es deficitaria para México.
“Estamos en desventaja. Estados Unidos envía más acero a México de lo que nosotros como país mandamos a la Unión Americana”.
Recordó que en el 2019, Estados Unidos eliminó sus aranceles del 25 por ciento sobre las importaciones de acero mexicano, las cuales fueron impuestas por el entonces presidente Donald Trump como una medida de presión.
En ese mismo año se firmó el acuerdo de exclusión de México y Canadá de la llamada medida 232.
Por lo anterior, el vocero de Canacero dijo que ellos (productores acereros) insisten en hacer valer el acuerdo de exclusión.
“Esto quiere decir que los dos países tendrían que iniciar un análisis de la situación y el país afectado tendría la posibilidad de imponer medidas espejo en contra de determinados productos”.