La legalización de autos procedentes del extranjero que impulsa el gobierno federal impactará al mercado interno, con la posibilidad de un daño a futuras inversiones en la cadena automotriz, estimó el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), Luis Espinosa Rueda.
Después que el pasado sábado el presidente Andrés Manuel López Obrador firmó el “Acuerdo para regularizar vehículos usados de procedencia extranjera”, es decir, unidades que llegan de otros países, principalmente de Estados Unidos, el representante del sector industrial en el estado consideró que con esta medida se institucionalizará la corrupción, ya que autos que ingresaron de forma ilegal contarán con permisos para poder circular.
El líder de la Canacintra en Puebla coincidió con la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) en el sentido de que la regularización de vehículos ilegales no sólo se limitará a los estados fronterizos, sino que podría ampliarse a todo el país, incluso, advirtió que esta legalización podría extenderse a otros bienes, situación que lejos de limitar el problema de contrabando lo hará más grande.
En ese contexto, señaló que la medida va en detrimento de la legalidad, ya que además de generar efectos negativos para la economía nacional, se permitirá el ingreso de autos contaminantes e inseguros.
“Esto es muy grave para la actividad del país y la posibilidad de crecimiento a través de inversión extranjera que claro, daña sobre todo el futuro de las inversiones de la cadena automotriz, porque al final se va a dañar el mercado interno”.
Refirió en entrevista que, en el pasado, durante el sexenio del presidente Vicente Fox Quezada, se emitió un decreto para regularizar vehículos usados de procedencia extranjera con resultados negativos para la economía.
En ese sentido, consideró que una forma de apoyar a las personas que requieren de un auto para sus actividades productivas, debe ser el desarrollo de sistemas de créditos u otros esquemas para comprar una unidad nueva y no la regularización de vehículos de procedencia extranjera conocidos como “chocolates”.
AFM