Hasta el mes de junio, las reparaciones al interior de la refinería Madero llevan un tercio de lo programado por Petróleos Mexicanos para este 2020. Es la instalación de la seis en todo el país con menor avance en el programa de trabajo, señala el reporte de la Secretaría de Energía, publicado en el documento final del Segundo Informe de Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Dentro de la información presentada por la dependencia y la empresa productiva del Estado al Presidente Andrés Manuel López Obrador, están concluidas las rehabilitaciones mayores a las plantas de Azufre 300 y la FCC 1, todo esto al primer semestre del año. En este ejercicio se aprobaron más de 2 mil millones de pesos dentro del paquete económico para ejecutar estas acciones.
Esto ha provocado incertidumbre en el sector constructor por la falta de transparencia, además del poco avance del dinero asignado para las maniobras, como lo señaló Eduardo Ramírez Leal, presidente nacional de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC).
“El programa de rehabilitaciones del Sistema Nacional de Refinación (SNR) considera atender los riesgos críticos de las instalaciones (integridad mecánica y seguridad), mejorar la eficiencia y estabilizar el proceso de crudo. Se elaboró un programa de rehabilitación integral en las seis refinerías existentes y hasta el momento se tiene un avance del orden del 76 por ciento en las plantas de proceso”, expone la Sener.
Para el complejo ubicado en el sur de Tamaulipas, tanto el avance programado y real alcanza el 33 por ciento, al concluir las reparaciones en 2 de seis instalaciones. Entre las observaciones destaca “la conclusión de las reparaciones mayores de las plantas Azufre 300 y FCC 1, así como el mantenimiento a la planta de aguas residuales MZ. En procura de materiales para la reparación menor de la planta FCC 2 y la Reformadora U 901”.
Sin embargo, existen en otras partes del país refinerías con un avance más significativo al mencionado corte. Por ejemplo, el más significativo se encuentra en Tula, donde los trabajos van al 89 por ciento, seguido de Salina Cruz en un 85 por ciento, Cadereyta en 75 por ciento, mientras que Minatitlán y Salamanca se encuentran ambas en un 67 por ciento cada una.
“Le insistimos mucho a Pemex para informarnos cuál es el recurso que se ha venido destinando a la refinería. En un principio se habló de 2 mil millones de pesos para cada complejo y resulta que en los últimos reportes lo máximo eran 900 millones de pesos ya aplicados. Eso significa que son todos los recursos que se están aplicando”, añadió Ramírez Leal.
Incluso, el Observatorio de la Industria de la Construcción de la CMIC reporta en su página en Tamaulipas, la ex paraestatal no ha transparentado las licitaciones para los mencionados trabajos de mantenimiento.