La Comisión Europea pedirá a las grandes tecnológicas y a los proveedores de telecomunicaciones de la Unión Europea detalles sobre sus gastos de inversión y sus planes de infraestructura en la nube, antes de presentar una normativa que podría obligar a las primeras a sufragar los costes de red, según dijo el martes una fuente familiarizada con el asunto.
Deutsche Telekom, Orange, Telefónica, Telecom Italia y los grandes operadores afirman que se trata de una contribución equitativa, ya que los seis mayores proveedores de contenidos representan algo más de la mitad del tráfico de datos de internet.
Google, unidad del conglomerado Alphabet, Netflix, Meta, Amazon y otros gigantes tecnológicos afirman que la idea equivale a un impuesto sobre el tráfico de internet, que sostienen podría socavar las normas europeas de neutralidad de la red que tratan a todos los usuarios por igual.
Bruselas tiene previsto poner en marcha una consulta pública con un extenso cuestionario la semana que viene, aunque el calendario puede cambiar. Es probable que dure unas 12 semanas antes de que la Comisión Europea redacte la legislación que los países de la UE y los parlamentarios europeos tendrán que debatir antes de que pueda convertirse en ley.
La Comisión Europea preguntará a las grandes empresas tecnológicas y de telecomunicaciones en qué están invirtiendo, cómo evolucionarán sus inversiones y si existe un déficit de inversión. También se les preguntará su opinión sobre el paso a la infraestructura en nube y las inversiones necesarias para ello, ya que los reguladores quieren que el debate vaya más allá del gasto en cables y torres, dijo la fuente.
Los reguladores también quieren conocer la relación entre las grandes tecnológicas y los proveedores de telecomunicaciones.
La comisión preguntará a los participantes en la consulta sobre las respuestas reguladoras en otras partes del mundo en materia de tarifas de red, como en Corea del Sur y Australia, y las lecciones aprendidas de ellas.
EVC