El debilitamiento del empleo formal ha ocasionado que el consumo en México disminuya 1.4 por ciento, indicó el reporte del Indicador de Consumo Big Data del área de Estudios Económicos de BBVA Research.
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La división de análisis destacó que el dato preliminar sobre el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) se ubicó en 0.2 por ciento, lo cual calificó como un signo que confirma la debilidad que está presentando la economía nacional.
La compañía señaló que la ralentización de la demanda externa de bienes duraderos y el menor gasto en construcción serán los principales detonadores que continúen debilitando la generación de empleo en el país.
De acuerdo con las cifras del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el número de trabajadores afiliados a esta institución reportó una variación anual promedio de 2.4 por ciento en los primeros siete meses del año.
Esta cifra se encuentra 1.3 por ciento por debajo de la registrada en el mismo periodo del año anterior.
“Esto corrobora nuestro sesgo a la baja sobre la previsión de crecimiento para 2024, misma que podría aproximarse al crecimiento que la producción ha mostrado en la primera mitad del año”, apuntó el área de análisis de la institución.
Añadió que, derivado del poco dinamismo económico, se detectó en su indicador de consumo una caída de 1.4 por ciento en julio en comparación con el mes anterior. El gasto en bienes también cayó 1.4 por ciento y el indicador de servicios disminuyó uno por ciento.
“La desaceleración de las ventas minoristas coincide con el menor dinamismo que el empleo formal ha registrado en los últimos meses, ante la desaceleración del sector industrial”, indicó BBVA Research.
Apuntó que, dentro del consumo de bienes, el gasto en alimentos cayó 1.8 por ciento, la cifra más baja desde abril, mientras que el gasto en bienes para el cuidado de la salud reportó una contracción de 3.2 por ciento durante el periodo.
El gasto en alimentos se ubicó 6.0 por ciento por encima de su nivel de enero, mientras que el consumo de bienes para el cuidado de la salud se ubicó 2.7 por ciento por debajo.
“Con respecto al componente de servicios, el gasto en hoteles y restaurantes registró contracciones tras dos meses de variaciones positivas; el consumo en restaurantes cayó 4.7 por ciento, mientras que el gasto en hoteles reportó una variación mensual de 2.4 por ciento”, indicó el área de análisis.
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VHIT