El Fondo Monetario Internacional (FMI) alertó que pese a la recuperación que se espera que la economía de América Latina y el Caribe tenga en 2021, tras la caída que registrará en 2020 debido a la crisis derivada de la pandemia del covid-19, tiene ante sí otra “década perdida”.
El director del Departamento del hemisferio occidental, Alejandro Werner, explicó que, hasta la fecha, alrededor de 3 mil personas han fallecido a causa del virus covid-19 en América Latina y el Caribe y mientras la pandemia continúa propagándose por la región, los países enfrentan la peor recesión económica desde que se comenzaron a producir estadísticas de cuentas nacionales en los años cincuenta.
Así, indicó en el blog del FMI, el complejo entorno externo, al que se suman las muy necesarias medidas de contención de la pandemia, ha provocado un desplome de la actividad económica en toda América Latina, cuyo crecimiento se enfila hacia una contracción de 5.2 por ciento en 2020.
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El directivo del Departamento del hemisferio occidental indicó que, con shocks atípicos de oferta y demanda, una crisis sanitaria y altos costos de financiamiento en toda América Latina, las medidas necesarias para mitigar los costos humanos y económicos de la crisis serán de enormes proporciones y exigirán una estrategia sin precedentes.
Retos en la implementación, dificultad para llegar a los más vulnerables
Detalló que, aunque en diferente medida, la mayoría de los países de la región ha adoptado medidas sanitarias importantes para contener la propagación del virus y en el ámbito de la política económica las medidas han variado, pero se han puesto en marcha; sin embargo, dado que estamos en territorio desconocido y que las respuestas de política aún están en evolución, las autoridades están enfrentando importantes retos de implementación.
Por ejemplo, expuso Werner, es posible que los gobiernos no puedan llegar a los hogares vulnerables mediante transferencias tradicionales en lugares que carecen de sistemas amplios de asistencia social y donde predomina la informalidad.
Además, abundó, es más complicado hacer llegar la asistencia a las empresas más pequeñas y las del sector informal y dado el alto nivel de informalidad en la región, los países deberían usar todos los registros disponibles y métodos posibles para llegar a las empresas más pequeñas y los trabajadores informales.
Habrá considerables aumentos de déficit público y deuda
A lo anterior se suma, añadió el funcionario del FMI, que la pandemia, la recesión y las respuestas de política necesarias provocarán considerables aumentos del déficit público y la deuda, y los países tendrán que crear espacio fiscal reduciendo el gasto no prioritario y mejorando la eficiencia del gasto.
Por tanto, aseguró, los países tendrán que cerciorarse de que las políticas adoptadas en respuesta a la crisis no sean percibidas como permanentes para que no se perpetúen y generen distorsiones, en especial la asistencia focalizada a ciertos sectores.
lvm