El Banco Mundial (BM) advirtió que el covid-19 desató en América Latina y el Caribe una crisis socioeconómica y de salud sin precedentes; en México, señaló que las encuestas oficiales revelan que la pandemia provocó disminuciones en la cobertura de servicios en todos los niveles socioeconómicos.
De acuerdo con el reporte Construyendo sistemas de salud resilientes en América Latina y el Caribe, para los servicios de salud en México donde la recuperación está ocurriendo, ésta favorece a los ricos y, por tanto, se asocia con aumentos en la inequidad en comparación con los niveles pre pandemia.
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En términos de protección financiera en salud, se observó un empeoramiento persistente tanto para pagos catastróficos, como empobrecedores, y los datos brindan fuertes indicaciones de que la pandemia está erradicando el progreso logrado con tanto esfuerzo hacia la cobertura universal en salud.
El Banco Mundial abundó en que la limitada capacidad del sistema de salud también perjudicó la capacidad de los países para hacer frente a las crisis y los aumentos repentinos de la demanda; por ejemplo, Chile, Colombia, Costa Rica y México tienen como máximo 2.1 camas por cada mil habitantes, mientras que el promedio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) es de 4.7 por cada mil habitantes.
Falta de inversión, menor atención curativa
Añadió que la subinversión en salud pública antes de la pandemia dejó los sistemas en América Latina y el Caribe severamente mal preparados y orientados hacia la atención curativa, pues hay un mayor exceso de mortalidad en Perú, México, Ecuador y Bolivia.
El organismo internacional destacó que la atención costo-efectiva para las personas con diabetes requiere un monitoreo cuidadoso, utilizando análisis de sangre para guiar la terapia farmacológica adecuada y prevenir complicaciones.
En el primer año de la pandemia, las personas en Argentina, Brasil, Chile y México tuvieron menor probabilidad de hacerse el análisis de sangre para control de la diabetes. Para 2021, Brasil y Chile pudieron compensar estas disminuciones, pero en México continuaron las disminuciones sustanciales en estas pruebas.
“En México y muchos otros países de la región, la falta de detección del cáncer de mama afectará a muchas mujeres que serán diagnosticadas en etapas más avanzadas”, agregó.
Aumento de la violencia
Aunado a lo anterior, los aislamientos estuvieron acompañados de numerosos episodios de violencia doméstica, pues las llamadas a las líneas de ayuda para casos de violencia doméstica aumentaron un 91 por ciento en Colombia, 38 por ciento en México y 48 por ciento en Perú.
Inseguridad alimentaria
En este contexto, el Banco Mundial apuntó que en México las reducciones en el empleo y los ingresos se han asociado con una mayor inseguridad alimentaria. Al comparar 2021 con 2018, los niños tenían más probabilidades de sufrir retraso en el crecimiento a nivel nacional, en áreas rurales, en el sur y en áreas de baja marginación. En el mismo período, los niños eran más propensos a tener sobrepeso a nivel nacional y en el sur.
En resumen, la pandemia del covid-19 aumentó la inseguridad alimentaria en los hogares con niños, y las disrupciones en los servicios de salud y nutrición provocaron un aumento de la desnutrición y la mortalidad.
Ante esta situación, el Banco Mundial instó a México a invertir en intervenciones nutricionales para mujeres gestantes y niños es una estrategia de costo-beneficio que debe garantizarse, especialmente en situaciones de crisis, para prevenir y mitigar la desnutrición y sus efectos a largo plazo en el desarrollo infantil y la carga económica.
AMP