El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (Ceesp) reveló que a pesar de que las expectativas de crecimiento para 2024 van mejorando paulatinamente, la percepción generalizada apunta a un menor ritmo de avance, incluso para los siguientes años, toda vez que los pronósticos anticipan un crecimiento más cercano a 2 por ciento en el mediano plazo.
“En 2023 la economía registró un avance de 3.1 por ciento, resultado que, si bien se mantiene por arriba de 3.0 por ciento, estuvo por debajo de las expectativas más recientes”, explicó.
Además, mencionó que de acuerdo con la estimación del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), durante el cuarto trimestre del 2023 el Producto Interno Bruto (PIB) creció sólo 0.1 por ciento, lo que representa su menor avance en los últimos nueve trimestres, resulta significativamente inferior al pronóstico de los especialistas que anticipan un aumento ligeramente por arriba de 0.5 por ciento.
El Ceesp indicó que según la encuesta de expectativas del Banco de México (Banxico), el promedio de crecimiento esperado para 2024 es de 2.37 por ciento y para 2025 de 2.0 por ciento, mientras que la encuesta Citibanamex registra avances de 2.5 por ciento y 2.0 por ciento.
“El debilitamiento de las expectativas refleja la poca efectividad de las políticas públicas instrumentadas para facilitar el crecimiento, desde la constante posición antagónica del gobierno frente a la actividad del sector privado, hasta la cancelación de proyectos en diversos sectores, como el aeroportuario, el petrolero y el eléctrico, entre otros, incrementó sustancialmente la incertidumbre para invertir”, señaló el organismo empresarial.
Respecto a este entorno, destacó que es importante tener en consideración que menores flujos de inversión inhiben un mayor crecimiento, limitan una mayor creación de empleo formal mejor remunerado e impulsan la precarización del sector laboral y favorecen la informalidad.
En cuanto al abatimiento de la inseguridad, el organismo empresarial indicó que es uno de los mayores desafíos para el país por la propagación del crimen a lo largo del territorio, aunque las autoridades insisten en avances en materia de seguridad.
De acuerdo con los más recientes resultados de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción Sobre Seguridad Pública (Envipe), del Inegi, en el tercer trimestre del 2023 el costo de la inseguridad y el delito en los hogares fue de 319.1 mil millones de pesos, cifra equivalente a 1.1por ciento del PIB.
El Ceesp, manifestó que más allá de los objetivos políticos del Gobierno Federal, se deberían priorizar acciones para reducir drásticamente la violencia y extorsión con el fin de generar mayor crecimiento y bienestar.