Los consumidores mexicanos prefieren los vinos españoles: de las de 4,000 etiquetas que se comercializan en el país, 50% proviene del país ibérico, gracias a que los consumidores nacionales reconocen la relación calidad–precio.
Y es que España cuenta con una larga tradición vitivinícola, es el mayor exportador mundial de vino y tienen un millón de hectáreas para el cultivo y producción de uva. Destaca la región de Ribera del Duero con más de 300 bodegas, y seleccionada como Mejor Región Vitícola del Mundo en 2012.
Denominación de Origen
Una de las características que distingue a los caldos de esta región es la Denominación de Origen (D.O.), ya que a partir de que se le otorgó en 1982 se pusieron en marcha nuevas prácticas de cultivo, la introducción de las más modernas tecnologías para la elaboración del vino y los rigurosos procesos de control aplicados desde el Consejo Regulador, han hecho de la Ribera del Duero un sinónimo de calidad, de ahí que sean los favoritos de los mexicanos.
Contraetiqueta
El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Ribera del Duero avala con su sello y una contraetiqueta numerada la autenticidad y calidad de los vinos amparados. Estos distintivos permiten garantizar de la forma más segura y fiable, su producción y comercialización.
¿Cuál vino prefieres?
Cada partida de vino producida en la Denominación de Origen Ribera del Duero se somete a un control que abarca; aforos de las viñas, origen y calidad de la uva recepcionada, movimientos del vino y control físico-químico y organoléptico del vino antes de salir al mercado garantizando una óptima calidad en su amplia y variada oferta. Puedes elegir entre:
Tintos
Se elaboran con un mínimo del 75% de la variedad tempranillo, también conocida como Tinta del País o Tinto Fino. En caso de no ser el 100% de esta uva se puede mezclar con cabernet-sauvignon, merlot, malbec o garnacha.
Tinto Joven o Cosecha
Vino sin permanencia en madera o con un paso por barrica inferior a 12 meses. Llega al mercado pocos meses después de la vendimia.
Tinto Crianza
Vino que ha permanecido un mínimo de 12 meses en barrica de roble y se comercializa con posterioridad el 1 de octubre del segundo año tras la vendimia.
Tinto Reserva
Es un vino con 36 meses de envejecimiento entre barrica y botella, cumpliendo un mínimo de 12 meses en barrica. Llega al mercado con posterioridad al 1 de Octubre del tercer año tras la vendimia.
Tinto Gran Reserva
Es un vino con 60 meses de envejecimiento entre barrica y botella, cumpliendo un mínimo de 24 meses en barrica. Llega al mercado con posterioridad al 1 de Octubre del quinto año tras la vendimia.
Rosados
La elaboración de los vinos rosados se efectúa con un mínimo del 50% de las variedades de uva tinta autorizadas.
Ribera Rosado
Fermentado en ausencia del hollejo de la uva, puede disfrutarse poco tiempo después de la vendimia.
Blancos
Hace tan solo unos meses se otorgó la D.O. a los vinos blancos con albillo mayor, una uva autóctona y centenaria, y a decir de los expertos es la más compleja de todas las variedades blancas.
Para más información visita riberadelduero.es