Apple fue objeto de una demanda colectiva de 785 millones de libras (unos mil millones de dólares) interpuesta por más de mil 500 desarrolladores de aplicaciones en Reino Unido en relación con las tarifas de su App Store.
El sector de servicios de Apple, que incluye la App Store, ha visto crecer sus ingresos a un ritmo acelerado en los últimos años y ahora ronda los 20 mil millones de dólares trimestrales.
Sin embargo, las comisiones del 15 al 30 por ciento que la empresa cobra a algunos fabricantes de aplicaciones por el uso del sistema de pago in-app han sido criticadas por los desarrolladores y puestas en el punto de mira de los reguladores antimonopolio de varias naciones.
Apple ha dicho previamente que 85 por ciento de los desarrolladores de la App Store no pagan ninguna comisión y que ayuda a los desarrolladores europeos a acceder a mercados y clientes en 175 países de todo el mundo a través de su tienda de aplicaciones.
La demanda británica ante el tribunal de apelación de la competencia fue presentada por Sean Ennis, profesor del Centro de Política de la Competencia por la Universidad de East Anglia y antiguo economista de la OCDE, en nombre de mil 566 desarrolladores de aplicaciones.
"Las tarifas que Apple cobra a los desarrolladores de aplicaciones son excesivas y solo son posibles gracias a su monopolio en la distribución de aplicaciones en iPhones y iPads", dijo en un comunicado Ennis, que ha sido asesorado por el bufete de abogados Geradin Partners.
"Las tarifas por sí mismas son injustas y constituyen una práctica abusiva. Perjudican a los desarrolladores de apps y también a los compradores de apps", agregó.
AMP