Discurso de AMLO confronta visión de grandes empresarios

Carlos Slim descarta incertidumbre y asegura que sus palabras son una invitación a la inversión; Claudio X. González advierte que al país le irá “muy mal”.

Carlos Slim, presidente de Grupo Carso.
Editorial Milenio
Ciudad de México /

El discurso de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) durante su toma de protesta como presidente de México generó controversia entre el empresariado mexicano, toda vez que, por un lado Carlos Slim, el hombre más rico del país, negó que haya incertidumbre por el nuevo mandatario, mientras que Claudio X. González, presidente de Mexicanos contra la Corrupción, indicó que nos “irá muy mal” porque su discurso contuvo muchas amenazas para el futuro.

Diversos representantes de la iniciativa privada coincidieron en que su discurso fue en línea con su campaña y reiteraron la confianza de las inversiones en el sexenio que inicia. Por ejemplo, Carlos Slim, presidente de Grupo Carso, afirmó que las palabras fueron una invitación a la inversión y que, hacia adelante, el reto es atender todos los rezagos y problemas.

Enfatizó en que la corrupción ha sido el mayor freno del desarrollo del país y que el nuevo Presidente deberá trabajar para que exista mayor eficacia en la inversión nacional y extranjera. “Lo que ha fallado es una visión de futuro, un gasto corriente en exceso y la corrupción. El discurso que dio va en línea a atacar estos puntos”, señaló.

El también empresario Alfredo Harp Helú dijo en su cuenta de Twitter: “Reitero mi compromiso de trabajar al máximo y deseo lo mejor para nuestro presidente @lopezobrador_ y a México le irá excelente”.

En contraste, en una serie de tuits, el empresario y activista Claudio X. González dijo que los comentarios del Presidente van contra el libre mercado y a favor de una visión retrógrada, estatista, intervencionista y anquilosada, por lo que, consideró, “nos va a ir mal, muy mal”.

Destacó que hubiera convenido un mensaje de conciliación, unión y la suma de todos en el marco de la ley, no uno “maniqueo, simplista y polarizador” que genera incertidumbre. “La incertidumbre no es amiga de la inversión y el crecimiento, sin el cual no puede haber cuarta transformación”.

El empresario criticó la reiteración de que durante este sexenio no se usará el fracking ni los transgénicos, así como la confirmación de la reforma educativa, lo que calificó como “lo más grave, en un mensaje que contiene muchas amenazas para el futuro del país”.

En este sentido, el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana, Gustavo de Hoyos, aseguró que López Obrador pudo haber hecho más para generar confianza con su discurso, pero que el saldo del mismo es negativo.

“El mensaje no va generar tranquilidad, particularmente el hecho de que haya descartado los avances en materia energética”, indicó en conferencia telefónica.

Quien tomó de buena forma el mensaje fue Ricardo Salinas Pliego, presidente de Grupo Salinas, al señalar que los empresarios trabajarán con el nuevo gobierno para construir un mejor país. “Los mexicanos somos muy luchones, emprendedores y nos gusta salir a trabajar”.

Francisco Cervantes, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales, señaló que fue un discurso de cambio, por lo que están dispuestos a trabajar con él y asumir cambios; sin embargo, piden que cuide la competitividad, dado que se ha ganado mucho terreno.

El presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Juan Pablo Castañón, dijo que las ideas de López Obrador van orientadas a causas sociales, al mismo tiempo que busca la unidad y crecimiento económico del país.

“La inversión energética es importante y dejó muy claro que se fortalecerá la inversión pública y privada. Estamos optimistas”, abundó.

Paquete Económico 2019



El subsecretario de Hacienda, Arturo Herrera, confirmó tras la toma de protesta de AMLO, que el paquete económico de 2019 se presentará hasta la fecha límite para su entrega, el 15 de diciembre, porque están esperando hasta el último momento para ver el comportamiento de las cotizaciones del petróleo, en virtud de las caídas que ha registrado.



El funcionario dijo que los retos de este presupuesto se relacionaron con hacer ajustes que permitieran introducir nuevos programas, lo que requirió un “micromanejo” con cálculos muy específicos.



Agregó que habrá algunos cambios y consolidación fiscal, aunque no quiso adelantar detalles: “lo más importante es el superávit fiscal de 1 por ciento del PIB, ese es un esfuerzo muy importante, en línea con lo que ha pasado respecto a disminuciones de deuda con respecto al producto interno bruto. 





Con información de:

Frida Lara, Cristina Ochoa Gersaín Grande, Silvia Rodríguez, Fernando Damián y Elia Castillo





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