Víctor Rodríguez Padilla, como nuevo director general de Petróleos Mexicanos (Pemex), tiene como primer mandato de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, acelerar la transición sustentable de la petrolera estatal.
Pero para lograrlo tiene por delante al menos dos retos importantes: reducir su abultada deuda e incrementar su productividad.
Y no será fácil. Su deuda financiera alcanza un billón 826.5 mil millones de pesos. Y de acuerdo con el Natural Resource Governance Institute, en su reporte llamado “Pemex y la transición energética: respuestas oportunas a retos crecientes”, confirmó que la empresa es la petrolera más endeudada del mundo y una de las que está en mayor riesgo de desaparecer en un escenario en el que se acelere el cambio a energías sostenibles.
“Pemex ocupa el puesto número 11 entre las empresas petroleras estatales con mayor exposición al riesgo de transición, de las 58 que analizamos. Si la empresa persigue un objetivo enfocado únicamente en maximizar la producción, puede verse forzada a invertir en proyectos con altos costos, que no serán rentables en un contexto de acelerada transición energética mundial”, explica el Instituto
Además, la empresa productiva del Estado sufrió la rebaja de sus calificaciones crediticias de algunas firmas como Moody's, por lo que su actual director, Octavio Romero Oropeza, afirmó que muchos calificativos no tienen sustento.
“No compartimos la visión de la agencia calificadora Moody's que, conforme a metodologías propias y asumiendo escenarios inventados, decidió bajar la calificación crediticia de Pemex, en ese contexto consideramos que a diferencia de lo que supone la calificadora no hay razones para asumir menor voluntad del gobierno federal para seguir respaldando a la empresa", dijo en conferencia con analistas.
Para Romero Oropeza Pemex, como empresa del Estado, cuenta con todo el respaldo del gobierno de México.
"Tampoco se comparte la idea de considerar escenarios extremos que impliquen cancelar operaciones en refinerías, todo lo contrario, creemos que con los resultados alcanzados se tienen los elementos suficientes para prever la conveniencia financieramente de Pemex en mediano plazo en la medida que se requiera", expresó.
La deuda
De acuerdo con los reportes financieros de Pemex, al cierre de junio de 2024, su deuda financiera es de un billón 826.5 mil millones de pesos, apenas 12.3 por ciento menos que lo registrado al finalizar 2018.
Alejandra Macías, directora ejecutiva del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (Ciep), contó a MILENIO que ayudó la política frontal del gobierno de restarle responsabilidades y pagar su deuda para reducirla.
El Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco) detalló que desde junio de 2018 al mismo mes de 2024, la deuda de corto plazo -aquella con vencimientos menores a un año-, pasó de 167 mil 100 millones a 396 mil 300 millones de pesos, lo que representó un incremento de 137.1 por ciento.
Mientras que la deuda de largo plazo, que contiene vencimientos iguales o mayores a un año, registró un baja de 24.7 por ciento desde lo registrado en 2018 a 2024.
Sin embargo, Alejandra Macías apuntó que el apoyo del gobierno no será suficiente si no es acompañada de una reestructuración operativa y financiera que la fortalezca.
Producción
La empresa cerró el segundo trimestre de 2024 con una producción de mil 784 millones de barriles de petróleo diarios, 1.65 por ciento mayor a lo registrado hace seis años, pero muy lejos de la meta planteada por López Obrador al inicio de su sexenio de 2.6 millones de barriles.
De acuerdo con la empresa estatal, el resultado del segundo trimestre de 2024 se debió principalmente a la declinación natural de algunos campos, como Ku Maloob Zap.
Otros factores que afectaron fueron el retraso en la instalación de infraestructura marina, condiciones climatológicas inusuales que afectaron las operaciones costa afuera y la demora en la terminación de pozos en campos de alta complejidad (debido a la profundidad, presión y temperatura).
“Para mitigar esta situación, estamos fortaleciendo el mantenimiento de la producción base y los pozos en campos nuevos”, señaló Pemex.
Hasta el segundo trimestre de 2024, la petrolera del Estado registró ventas totales por 409 mil 500 millones de pesos, 0.58 por ciento por encima de lo reportado al cierre de 2018.
Este resultado, de acuerdo con la empresa, fue por una menor exportación de crudo, recordando que el presidente Andrés Manuel López Obrador busca que el hidrocarburo que produzca la empresa se quede en el país. También afectó la apreciación del peso contra el dólar.
Esto fue contrarrestado por un aumento en las ventas nacionales principalmente por mayores precios del crudo y productos petrolíferos.
Gas
Por su parte, la producción total de gas asociado promedió 3 mil 731 millones de pies cúbicos diarios (MMpcd), mientras que al cierre de 2018 fue de 3 mil 809 millones.
Oscar Ocampo, coordinador de Energía y Medio Ambiente en el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), señaló que más allá de la ideología de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, en materia de política energética, el nuevo director de Pemex recibirá una empresa con retos muy importantes en materia de producción petrolera.
“Estamos en mínimos históricos en la plataforma de producción de Pemex, si quitamos los condensados, estamos en el orden del millón 500 mil barriles diarios, que es el mínimo que registró Pemex en los últimos 20 años, por lo menos, si no es que más”, comentó.