Las ferias turísticas internacionales tienen el objetivo de acercar a los operadores turísticos, como las agencias de destinos, aerolíneas, prestadores de servicios, hoteles, restauranteros, parques de diversiones, transportistas y otros, para crear alianzas y hacer negocios, pero sobre todo para atraer a turistas extranjeros.
Durante los días que dura el evento se negocian los precios y espacios para que los empresarios turísticos puedan poner a disposición del consumidor final desde un boleto de avión, hasta una estancia completa en hoteles y destinos turisticos, a través de una agencia de viajes tradicional o en línea.
De acuerdo con la Secretaria de Turismo en su portal Datatur, México cuenta con un mercado significativo en turismo de reuniones y convenciones, pues cada año recibe más de 265,000 eventos, con grandes ferias y convenciones internacionales que convocan a más de 29 millones de participantes y generan una derrama económica que equivale a 2.5% del Producto Interno Bruto (PIB) del país.
Pero a pesar de la incertidumbre por la desaparición del Consejo de Promoción Turística de México (CPTM), la presencia del país y de diversos destinos de la República está confirmada en las primeras y más importantes ferias internacionales de 2019.
Sin embargo, “no se ha dado a conocer cuánto costará asisitir a estás ferias, las que ha generado inquietud en el sector”, dice Roberto Cintrón, presidente de la Asociación de Hoteleros de Cancún y Puerto Morelos (AHCyPM).
La importacia de las ferias
Marisol Vanegas, secretaria de Turismo de Quintana Roo, dice que cada peso que ingresa por turismo al estado, tiene un impacto 3.2 veces mayor en la economía local, lo que permite que otros sectores se beneficien y haya un movimiento económico importante.
También asegura que a través de las ferias —la Feria de Madrid (FITUR) y ANATO en Colombia este año — se logra captar no solo operadores de viajes, sino inversionistas hoteleros y de otros sectores.
Por su parte, Roberto Gaudelli, CEO de Gaudelli MCW, menciona que “en muchos casos, las ferias son la oportunidad para que nuevos productos se presenten en el mercado internacional, pues en tres días está concentrado todo el mercado posible para comprar ese producto”.
Las ferias básicamente hacen eso, acortar las distancias comerciales entre quien compra y quien vende para mantener, en el caso de productos consolidados, una relación que permita crecer.
Un ejemplo es la presencia de Quintana Roo en ANATO, la semana pasada en Bogotá. Gaudelli dice que “el mercado de Cancún y Riviera Maya desde Colombia creció 400% en los últimos años, debido al acercamiento directo a través de las ferias con los compradores colombianos; esto genera una mayor demanda hacia nuestros productos”.
El tema central ha sido los gastos que significan estas ferias para México. En ese sentido, el CEO de Gaudelli MCW dice que “otra cosa es si vamos a gastar mucho o poco, si vamos a hacer un evento caro o barato, si vamos a hacerlo de una manera austera, pero no participar es quitarte la oportunidad de promover y vender tu producto al mercado internacional”.
Otra razón importante de la participación de México en estas ferias es la atracción de turistas internacionales, ya que al país llegaron por avión 18,716 millones de turistas procedentes principalmente de Estados Unidos (10,496), Canadá (2,155), Reino Unido (590), Colombia (557) y Argentina (490), entre otros.
Menos gasto y presencia
La inversión que requiere una feria de esta naturaleza, puede hacerse de manera austera sin tener que quedar fuera del evento. Los pisos, que es como le llaman a los espacios en ellas, se tabulan en miles de dólares. Sin embargo, estos se pueden pagar integrando a la iniciativa privada, a comercio, gobiernos estatales y municipales, cada quien cooperando de acuerdo con su nivel de presupuesto y recaudación, para hacer eficiente el gasto.
La pasada administración hizo gastos considerables durante los eventos internacionales, por ejemplo, en enero de 2018, “La Noche de México” en el teatro real durante FITUR en Madrid costó 78,298 euros (poco más de 1,700 mdp), que no se vio reflejada en el retorno de inversión, ya que la mayor parte de los 222 invitados, fue gente del sector turístico de México.
Segun datos de la páina del CPTM en 2018, México estuvo presente en 25 ferias que conformaron su calendario internacional. Este año, solo se tiene confirmada la presencia del país en al menos 10 de las ferias internacionales más importantes, de las cuales ya se llevaron a cabo dos, la Feria de Madrid (FITUR) y la ANATO en Colombia.
“Por el momento, los tres primeros meses del año se mantendrán igual, México considera estar presente en la Feria Internacional de Berlín (ITB), ya están confirmadas con los lugares y todo, y la Feria de Reino Unido”, dice Darío Flota, representante de Turismo en Quintana Roo.
Flota agrega que el sector turistico desconoce cómo se participará y qué apoyo dará el gobierno federal, no solo en estos eventos, sino en el Tianguis Turístico que se realizará del 7 al 10 de abril en el puerto de Acapulco.
Por su parte, Cintrón Gómez destaca que no saben a qué ferias asistirán los representantes turísticos de México, con quién pueden ver los temas de costos y contratación, aspecto que sí les interesa, ya que deben hacer su planeación y presupuesto para la promoción.
Si sacamos la cuenta del número global de profesionales del sector que van en búsqueda de convenios, noches de hotel, vuelos y productos turísticos, como resultado tenemos una excelente oportunidad de hacer crecer el turismo de México.
Hay una fuerte competencia con otros países del Caribe, Centro y Sudamérica. Sin embargo, de la presencia de México en las ferias dependerá el crecimiento económico del turismo en los próximos años. Las ferias turísticas deben ser una inversión a la medida del presupuesto, pero al final, se necesita la presencia constante de la marca México en estos eventos internacionales.