Empresas del sector farmacéutico y de dispositivos médicos en México pidieron al gobierno mayor celeridad en sus procesos pero también que invierta más en el sector salud.
Humberto Izidoro, director general de Varian para América Latina, comentó que deben existir más inyecciones de capital por parte de la administración federal ante el crecimiento de algunos padecimientos crónicos como es el caso del cáncer.
"Debe haber un poco más de presupuesto por parte del gobierno para la salud, específicamente para la parte de radioterapia", indicó a MILENIO.
En 2021, la inversión en infraestructura del sector salud fue por 15 mil 880 millones de pesos, 29.4 por ciento menos que un año antes; según cifras de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Izidoro destacó que la mayoría de los aceleradores lineales (utilizados para radioterapia) en el país son muy antiguos. Algunos de estos fueron traídos después de 15 años de uso en Estados Unidos.
"Hay países que tienen políticas más adecuadas para tecnología, como Chile y Brasil, que hicieron el mayor programa de ampliación de equipo. Hay ejemplos también en Colombia", contó.
Alejandro Paolini, director de Siemens Healthineers para México, Centroamérica y el Caribe, señaló que el gobierno debe comprender que una política de salud necesita necesariamente de invertir en infraestructura.
“Nosotros trabajamos para dar facilidades, el problema es que ellos tengan el presupuesto y en México dista de ser el adecuado o necesario para atender esta situación. Porque si miramos el número de base instalada, parecería que no estamos tan mal, pero hay muy pocos aparatos de última tecnología y efectividad", remarcó el también presidente de la Asociación Mexicana de de Industrias Innovadoras de Dispositivos Médicos (AMID).
La Sociedad Mexicana de Radioterapeutas, indica que en el país hay 162 equipos de radioterapia, es decir 1.19 por cada millón de habitantes.
Por otro lado, Fernando Cruz, presidente de Novartis México, comentó en un taller que otro de los pendientes es que los procesos de aprobación de una investigación clínica tengan mayor celeridad.
“Hay áreas de oportunidad que podemos trabajar en conjunto con la autoridad; particularmente, el proceso que nos toca a nosotros para aprobación de investigación clínica podrían ser mucho más reducidos. A nivel mundial el estándar es de más o menos 40 días, en México ese proceso nos toma más de 90 días lograr esa aprobación regulatoria", explicó.