El presidente Andrés Manuel López Obrador lleva poco más de un año al frente del Ejecutivo en México y durante ese periodo el rendimiento económico no ha sido el mejor, muestra de ello es el retroceso del Producto Interno Bruto (PIB) de 0.1 por ciento durante 2019, que reportó el Inegi este jueves. Ante tal panorama, te explicamos los porqués de la primer caída de la economía mexicana desde hae una década.
En un estudio elaborado por el área de análisis de Banorte, se señaló que la moderación asociada al primer año de una nueva administración federal, impactando tanto a la inversión pública como privada; así como el retraso en el abasto de combustibles, algunas huelgas y en el extranjero a principio de año, contribuyeron al retroceso de la economía mexicana.
Por su parte, Gerardo Esquivel, subgobernador del Banco de México, compartió algunos puntos con el análisis de la institución financiera que afectaron a la economía, como el inicio de la actual administración federal, algunas decisiones de política y el contexto global, pero agregó la política monetaria restrictiva del país.
Regresando al análisis del banco, también consideró los bloqueos ferrocarrileros en Michoacán y la suspensión de proyectos de construcción en la Ciudad de México; y incertidumbre comercial afectando mayormente al sector manufacturero, en un contexto de tensiones entre Estados Unidos y China, renovadas amenazas de aranceles a México y dificultades para la aprobación del T-MEC.
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En contraste, indicó que reporte de hoy apunta a una recuperación de la actividad en diciembre, en particular, que la economía pudo haber crecido alrededor de 1 por ciento anual durante diciembre de 2019.
“Esta señal contrasta con datos como los indicadores del IMEF, manufacturero y no manufacturero permaneciendo en terreno de contracción y sin muchos cambios relativo a noviembre”.
Indicó que las ventas de Walmart y la ANTAD para el mes de diciembre también apuntaban a una mayor debilidad. No obstante, existen algunas cifras más positivas, tales como la fuerte caída de la tasa de desempleo, alcanzando un nuevo mínimo histórico y la recuperación de la confianza empresarial en todos los sectores con excepción del manufacturero.
“El desempeño en el trimestre parecería apoyar con mayor fuerza estas últimas señales, aunque permanecemos cautelosos ante su dinámica reciente”. Banorte reiteró su estimado para 2020 en 0.8 por ciento, con riesgos balanceados.
“En nuestra opinión, la sorpresa al alza respecto al consenso y nuestro estimado pone a la economía en una mejor posición hacia el inicio de este año. En este sentido, reiteramos nuestro pronóstico de crecimiento del PIB en 0.8 por ciento, ligeramente por debajo del mercado en 1.0 por ciento de acuerdo a la última encuesta de Citibanamex” indicó.
Expuso que la mejoría respecto al año pasado estará apoyada por diversos factores, incluyendo menor incertidumbre en el frente comercial tras la ratificación, lo que podría impulsar la confianza empresarial, y las políticas monetaria y fiscal como menos restrictivas en el margen.
“Además, creemos que la primera fase del plan de infraestructura ayudará a reactivar la inversión privada”, indicó.
En el fente físcal, consideró ue existe un espacio limitado para mayor estímulo aunque el gobierno está apuntando a un superávit primario más modesto de 0.7 desde el 1.0 por ciento; sin embargo, algunos riesgos permanecen, particularmente en términos de los ingresos ante los estimados de crecimiento y producción petrolera, entre otros.
lvm