El jefe de la Administración Federal de la Aviación (FAA), Steve Dickson, aseguró a un panel de la Cámara de Representantes de Estados Unidos que un problema eléctrico que dejó en tierra alrededor de 100 aviones Boeing 737 MAX el mes pasado en todo el mundo parece tener una "solución bastante sencilla".
El administrador de la FAA dijo al subcomité de Asignaciones de la Cámara de Representantes que supervisa el transporte que confía plenamente en la seguridad del MAX, que regresó al servicio después de estar en tierra durante 20 meses luego de dos accidentes fatales en cinco meses.
"Está funcionando tan bien o mejor en general que cualquier otro avión en el sistema de aviación en este momento", dijo Dickson.
La FAA mantiene reuniones diarias con Boeing para discutir el desempeño del MAX, afirmó. En febrero, la FAA dijo que estaba rastreando todos los aviones Boeing 737 MAX utilizando datos satelitales en virtud de un acuerdo con la empresa de vigilancia del tráfico aéreo Aireon LLC.
Reuters informó el 4 de mayo que la FAA pidió a Boeing que proporcione un nuevo análisis que demuestre que los numerosos subsistemas del 737 MAX no se verían afectados por los problemas eléctricos de conexión a tierra que se señalaron por primera vez en tres áreas del aparato en abril.
Boeing declinó responder el miércoles cuándo podría enviar boletines de servicio a las aerolíneas permitiéndoles hacer arreglos.
Los problemas eléctricos han suspendido casi una cuarta parte de la flota del 737 MAX. Dickson dijo que la FAA "está analizando la causa raíz de cómo se introdujo ese cambio en el proceso de fabricación y asegurándose de analizar si hubo otras implicaciones".
Las aerolíneas retiraron de servicio docenas de aviones 737 MAX a principios de abril después de que Boeing advirtió sobre un problema de conexión a tierra relacionado con la producción en una unidad de control de energía de respaldo ubicada en la cabina de algunos aparatos recientemente construidos.
srgs