Con más de 10 mil bólidos entregados, Ferrari conoció un año 2019 récord en ventas y espera seguir así en 2020. El fabricante italiano, que soplará sus 72 velitas este año, se impueso en el imaginario colectivo como una de las marcas emblemáticas del automóvil deportivo.
Sus coches están reservados a unos pocos dispuestos a pagar 200 mil euros por un modelo "clásico" y más de un millón para series limitadas. De hecho también están dispuestos a esperar largos meses para tener el precioso volante en sus manos.
El grupo -cuyos primeros coches salieron de la imaginación de Enzo Ferrari- buscó en los últimos años aumentar su producción, manteniendo al mismo tiempo esta noción de exclusividad tan importante para sus clientes.
En 2010, por ejemplo, sólo vendió 6 mil 573 vehículos. "El aumento sigue siendo limitado y no cambia nada en términos de exclusividad. Muestra sobre todo la ampliación del mercado de Ferrari a nivel mundial, hacia China e India por ejemplo", explica a la AFP Carlo Alberto Carnevale Maffè, profesor de estrategia de la universidad Bocconi de Milán.
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El año pasado, el grupo entregó exactamente 10.131 bólidos, 880 más que en 2018 (+9.5 por ciento). La zona Europa/Medio Oriente/África sigue siendo su principal mercado, con 4.895 vehículos y un aumento del 15.8 por ciento.
Las entregas aumentaron 20.3 por ciento en la región China/Hong Kong/Taiwán. Gracias a estas ventas récord, el volumen de negocios anual del fabricante aumentó 10.1 por ciento, acanzando los 3 mil 760 millones de euros.
"Estamos empezando 2020 con un buen impulso, una excelente cartera que se completará con dos nuevos modelos este año y un cuaderno de pedidos más importante que nunca", comentó su jefe, Louis Camilleri, en una conferencia telefónica con los analistas.
lvm