Accor, el grupo hotelero más grande de Europa por número de habitaciones, considera adquirir una participación minoritaria en Air France-KLM, en un movimiento que crearía un líder en el continente en la industria de viajes.
Cualquier acuerdo también permitiría al Estado francés reducir su posición en la aerolínea en problemas.
Las acciones de Air France-KLM subieron 7 por ciento en las primeras operaciones de la tarde del lunes, después de que el grupo hotelero francés confirmó que las compañías sostuvieron discusiones “en los últimos años con el objetivo de desarrollar proyectos digitales conjuntos, al igual que una plataforma de lealtad y servicios”.
Como parte del proyecto, Accor dijo que busca comprar una participación en Air France-KLM.
La aerolínea no quiso hacer comentarios.
El gobierno francés, propietario de una participación de 14 por ciento en Air France-KLM, y que tiene una valoración de alrededor de 430 millones de euros, dijo que “está abierto al principio” de una fusión con Accor.
Delphine Gény-Stephann, subsecretaria de Economía, dijo al sitio financiero Boursorama: “Es, sin duda, un proyecto industrial interesante. Depende de las empresas ver cómo avanzan esas conversaciones”.
Agregó: “El Estado francés tendrá voz y voto en cualquier acuerdo y tomará parte de cualquier conversación estratégica en su papel como accionista”.
Desde hace mucho tiempo Air France-KLM está inmersa en una disputa salarial con sus sindicatos, que sostienen que el Estado francés dirige la compañía.
En medio de la agitación, el valor de las acciones de la aerolínea cayó a la mitad, lo que sugiere que Accor podría comprar una participación minoritaria a una valoración barata.
“Al hacer que de alguna forma el Estado venda su participación en Air France, Accor lograría que fuera más fácil la reestructuración y el cambio de la compañía”, dijo una persona familiarizada con el acuerdo.
Air France-KLM lidia con una crisis de liderazgo luego de que Jean-Marc Janaillac, su ex director ejecutivo, dejó el grupo luego de perder el voto del personal por un acuerdo salarial que rechazaron los sindicatos de Air France.
La disputa salarial desató 15 días de huelgas, que le costaron a la línea aérea cerca de 400 millones de euros, reduciendo sus resultados y poniendo su viabilidad a largo plazo en el foco de atención.
Accor buscará tener voz y voto en una estrategia “fuerte y ambiciosa” para transformar Air France-KLM bajo un nuevo presidente ejecutivo, dijo la persona familiarizada con el acuerdo. “No tiene sentido si tu participación no viene con una influencia”.
La participación estatal de 14 por ciento en la empresa tiene un derecho de voto de 23 por ciento.
Sébastien Bazin, director ejecutivo de Accor, podría buscar asumir un papel de presidente no ejecutivo en la aerolínea.
Air France-KLM estableció en mayo un equipo interino de liderazgo después de la renuncia de Janaillac. Se creó un comité de gestión compuesto por tres personas y que encabeza Frederic Gagey, el director financiero del grupo, que ahora también se desempeñará como director ejecutivo de la compañía.