Anticipa Repsol escasez de petróleo a escala mundial

El presidente de Repsol, el grupo español de energía, advirtió sobre una escasez en el suministro de petróleo que se deriva de la falta de inversión, incluso cuando dijo que hacer un gasto fuerte en la producción a largo plazo es “ilógico”.

Antonio Brufau dijo al Financial Times que los precios de petróleo subían “mucho”, por encima de 85 dólares por barril, antes de que se empiecen a sentir los efectos de una reducción en el gasto por parte de las grandes compañías de gas y petróleo.

“Todavía no vemos el impacto de la falta de inversión cuando todas las compañías dejamos de invertir durante la caída”, dijo Brufau, el anterior director ejecutivo.

Cuando los precios de petróleo entraron en una espiral a la baja después de 2014, las compañías de gas y petróleo más grandes del mundo empezaron a ahorrar y redujeron los costos a medida que sus balances y los precios de sus acciones sufrieron.

Entonces desviaron fondos hacia la producción de ciclos cortos, como el gas y petróleo de esquisto de EU, con el objetivo de lograr una producción de manera más rápida y barata.

“La vida de nuestras inversiones ahora es de seis a siete años”, dijo Brufau. Se encuentra entre las más cortas en el sector.

Algunos ejecutivos de la industria y reguladores del sector de energía dijeron que este tipo de producción por sí sola no va a ser suficiente para satisfacer la creciente demanda de crudo. Una inversión insuficiente en proyectos a gran escala y a largo plazo va a conducir a una escasez en el suministro a principios de la década de 2020, dijo la Agencia Internacional de la Energía, justo cuando la producción de esquisto de EU se estanque.

Pero las empresas se encuentran bajo presión para mostrar una disciplina financiera y muchos devuelven dinero a los inversionistas a través de los dividendos y las recompras de acciones. “Necesitas poder demostrar que tu dinero que se gasta en proyectos lo vale, y eso lo debes hacer muy rápidamente”, dijo Brufau.

Dijo que la estrategia de Repsol se produce en medio de un cambio fundamental en la forma de pensar en toda la industria de energía con respecto a la futura demanda de los combustibles fósiles.

“En el pasado, hace 10 años, las mejores compañías de gas y petróleo eran las que tenían más vida en sus reservas”, dijo Brufau. “Eso se ha vuelto menos importante”.

Siempre y cuando las reservas se sustituyeran y la producción fuera estable, esto ofrecía suficiente flexibilidad para las grandes compañías de energía, dijo, sin tener que aumentar enormemente la producción de gas y petróleo. “Seguir invirtiendo dinero en el campo es una decisión ilógica”, dijo.

También se produce cuando los automóviles eléctricos y los combustibles alternativos amenazan el dominio del petróleo, ya que las industrias que utilizan combustible para el transporte y tienen un uso intensivo de carbono se ven obligadas a reducir las emisiones.

Repsol planea invertir 15 mil millones de euros para 2020, y de eso, 53 por ciento se va a dedicar a la exploración y producción y el resto a la refinación, los productos químicos, el gas, la electricidad y los activos de bajas emisiones.

Aunque Brufau dijo que el negocio principal de la producción de gas y petróleo todavía se mantenía como el foco principal, Repsol asigna 2 mil 500 millones de euros en energías más limpias.

El negocio de Repsol se ajustó a favor del gas en comparación con el petróleo, el cual dijo Brufau que va a desempeñar un papel importante en la generación de electricidad junto con los renovables.

Pero a medida que los precios del petróleo alcanzaron un máximo de cuatro años, Brufau dijo que se corre el riesgo de que el crudo suba más en medio de la incertidumbre sobre las capacidades adicionales de producción

Las exportaciones de petróleo de Irán ya empezaban a caer antes de las nuevas sanciones de Estados Unidos, y hay muchas dudas sobre qué tanto podrán compensar eso las grandes naciones productoras.

“Depende de qué tanta capacidad excedente tengan los productores OPEP, y no creemos que tengan mucha”, dijo Brufau, quien además dijo que los barriles adicionales solo harán que el precio del barril de crudo caiga a lo mucho a 70 dólares.

Si bien hay un colchón de varios millones de barriles por día, “en dos años estos se habrán agotado”, dijo.