Una cantidad récord de ejecutivos estadunidenses están vendiendo acciones de sus compañías, ya que directivos de empresas, desde Goldman Sachs hasta Tesla e incluso el propio grupo de medios de Donald Trump se benefician con el aumento del mercado de valores que se produjo después de su victoria electoral.
La tasa de las llamadas ventas de los directivos alcanzó un máximo récord para cualquier trimestre en dos décadas, según VerityData. Las ventas, realizadas por ejecutivos de empresas del índice Wilshire 5000, incluyen transacciones de única ocasión de toma de utilidades, así como ventas regulares provocadas por los planes de operaciones automáticos de los ejecutivos. El Wilshire 5000 es uno de los índices más amplios de compañías estadunidenses.
Aunque las ventas de acciones por parte de directivos es una actividad habitual -sobre todo porque el mercado de valores ya estaba rompiendo récords antes de la victoria de Trump- el aumento posterior al 5 de noviembre subraya cómo los ejecutivos estadunidenses ya se están beneficiando personalmente de su regreso antes de que vuelva a entrar en la Casa Blanca. El S&P 500 subió un 2.5 por ciento el día después de la elección, su mejor día en más de dos años. El S&P 500 subió más del 24 por ciento este año.
La última vez que las ventas de acciones por parte de directivos frente a las compras en las instituciones financieras fue tan alta fue en noviembre de 2016, la primera vez que Trump fue elegido como presidente. Las ventas entre los funcionarios de las empresas de bienes industriales alcanzaron el nivel más alto desde 2017.
“Con el cierre del año y los resultados de las elecciones, estamos experimentando este enorme estallido de ventas aquí”, dijo Ben Silverman, vicepresidente de investigación de VerityData. El volumen de ventas por parte de directivos estuvo por debajo del promedio en los primeros tres trimestres del año, dijo.
Las ventas de acciones de directivos suelen ser un barómetro del rendimiento de la empresa, y los inversores y analistas las examinan en busca de pistas sobre los resultados futuros. Pero en un mercado en alza, cuando las ventas de acciones por parte de los directivos se vuelven desenfrenadas, las tendencias son menos que un indicador de los movimientos inminentes del mercado de valores, dijo Silverman.
“En general, con las ventas, en términos de predicción, los directivos se adelantan unos dos o tres trimestres”, dijo. “Cuando empiezan a ver espuma en el mercado es cuando intentan generar liquidez de forma más agresiva”.
En Goldman Sachs, cuatro directivos de alto nivel -incluido el vicepresidente ejecutivo John Rogers, el director financiero Denis Coleman y el miembro del consejo Tom Montag- ya vendieron más de 28 millones de dólares desde el 6 de noviembre. Las acciones de Goldman se dispararon un 12 por ciento desde el día de las elecciones, beneficiándose del optimismo sobre más fusiones y menos regulación financiera bajo una segunda administración Trump.
“Estamos satisfechos con el rendimiento de nuestras acciones”, dijo Goldman Sachs en un comunicado. “Nuestros altos directivos siguen teniendo inversiones significativas en Goldman Sachs y su futuro. Las ventas son una fracción del total de lo que son dueños”.
El vicepresidente de Evercore, Ed Hyman, realizó sus primeras ventas de acciones en el banco boutique en los días posteriores a la elección, ganando más de 40 millones de dólares. Un portavoz de Evercore dijo que la venta de Hyman fue únicamente con fines de planeación patrimonial.
El director financiero de Tesla, Vaibhav Taneja, vendió 2 millones de dólares y la directora del consejo de administración, Kathleen Wilson-Thompson, 34.6 millones de dólares desde las elecciones. Las acciones de Tesla registran una ganancia de un 35 por ciento desde las elecciones, con el fundador Elon Musk desempeñando un papel central en la configuración de los nombramientos del gabinete para el segundo mandato de Trump. Las acciones de Tesla ganaron un 5.6 por ciento adicional el lunes, cerrando a 338.74 dólares, después de que Bloomberg informó que la administración entrante de Trump podría flexibilizar las regulaciones para los coches de autoconducción.
Algunos leales a Trump aprovechan el aumento del mercado posterior a las elecciones para vender acciones. Tres ejecutivos de Trump Media & Technology Group, la compañía detrás del sitio de redes sociales del presidente electo Truth Social, vendieron 16.2 millones de dólares desde el 8 de noviembre.
El día después de las elecciones, el director ejecutivo de Axos Financial, el banco estadunidense de tamaño mediano que cuenta a Trump entre sus mayores solicitantes de préstamos, vendió unos 10.7 millones de dólares de las acciones de la compañía.
Uno de los mayores beneficiarios del repunte del mercado por el triunfo de Trump fue un donante de su rival del partido demócrata, Kamala Harris. El cofundador de Palantir Technologies, Alex Karp, vendió cerca de 900 millones de dólares en acciones desde las elecciones. Las acciones de la compañía ya subieron un 48 por ciento desde el día anterior a las elecciones, cuando informó de unos ingresos trimestrales récord y aumentó las previsiones de ingresos a medida que aumentaba la demanda de software de inteligencia artificial.
La inminente incertidumbre sobre las políticas económicas de Trump podría estar impulsando a los directivos a vender ahora, dijo Swami Kalpathy, profesor de finanzas de la Universidad Cristiana de Texas.
Con más aranceles, “va a haber algunos perdedores (y) algunas industrias podrían verse gravemente afectadas”, dijo. “Tenemos un buen repunte. Pero la otra historia es que tal vez los ejecutivos esperan revisiones en los precios de las acciones”.
Tesla y Palantir no respondieron a las solicitudes de comentarios.