EU ante riesgo de recibir 2019 con cierre parcial de gobierno

Mick Mulvaney, el jefe de gabinete entrante de la Casa Blanca, advirtió que el cierre de gobierno de Estados Unidos podría seguir hasta el nuevo año después de que Donald Trump no logró convencer a los demócratas de financiar su muro en la frontera entre México y EU.

Mulvaney, quien también trabaja como director de presupuesto de la Casa Blanca, dijo que era “muy posible” que el cierre, que comenzó a la medianoche del viernes, podría continuar hasta que el nuevo Congreso preste juramento el 3 de enero.

La Casa Blanca y los demócratas se mantienen en un punto muerto con respecto a la demanda de Trump de que el Congreso financie el muro en la frontera entre México y Estados Unidos, que fue un elemento central de su campaña presidencial.

El cierre de gobierno, que afecta a nueve agencias gubernamentales, entre ellas el departamento de Estado y al de Justicia, contribuyó a un caótico fin de año en Washington a medida que Trump cada vez toma más decisiones que van contra el consejo de sus principales asesores.

Antes del fin de semana, Trump exigió que los legisladores incluyeran 5 mil millones de dólares para el muro fronterizo en el presupuesto de gasto que el Congreso debe aprobar para financiar al gobierno.

Los demócratas se mostraron reacios a la solicitud, en parte porque no quieren darle una victoria para su campaña de reelección de 2020, pero también porque les dio un regalo político hace dos semanas cuando en una junta extraordinaria en la Oficina Oval dijo que estaría “orgulloso” de cerrar el gobierno.

“Si quieren abrir el gobierno, debe olvidarse del muro, simple y llanamente”, dijo el sábado Chuck Schumer, el principal Demócrata en el Senado.

Mulvaney dijo el sábado que la Casa Blanca presentó una oferta a los demócratas —una solicitud para un financiamiento del muro fronterizo por debajo de los 5 mil millones de dólares—, pero que todavía no reciben una respuesta.

El domingo Trump repitió los llamados para el financiamiento del muro. “La única forma de detener las drogas, pandillas, tráfico de seres humanos, elementos criminales y tantas cosas más que entran a nuestro país es con un muro o una Barrera”, tuiteó el Presidente. “¡Los drones y todo lo demás son maravillosos y divertidos, pero solamente funciona un buen muro a la antigua!”.

Los demócratas y algunos republicanos están furiosos por la forma como el presidente Trump manejó la situación. La semana pasada aseguró que firmaría un compromiso bipartidista que habría mantenido al gobierno con financiamiento hasta el nuevo año. Pero cambió el curso después de que varios conservadores que son populares entre su base criticaron la decisión.

“Este es el comportamiento del pantano (swamp) en su punto óptimo”, destacó Rush Limbaugh, el comentarista conservador de un programa de entrevistas en la radio, en referencia al mantra de “drenar el pantano” que Donald Trump repitió durante la contienda de 2016.

Ann Coulter, provocadora comentarista de derecha, quien es popular con los conservadores de extrema derecha que quieren más seguridad en la frontera, dijo que en 2020 no votaría por Trump si no construye el muro.

Bob Corker, senador republicano de Tennessee, quien ha sido crítico del mandatario, describió la situación como “la tiranía de los presentadores de programas de radio hablada”, quienes tienen una influencia excesiva en el presidente.

Acusó a Trump de crear una pelea por el muro de la frontera para recurrir a su base.