Fed lleva tasa de interés al nivel más alto en 16 años

La Reserva Federal de EU subió el costo del dinero un cuarto de punto, para ubicarlo en un rango de entre 5 y 5.25%; la turbulencia bancaria fue clave para el aumento, destaca Jerome Powell

El presidente del banco central estadunidense. Jim Lo Scalzo/EFE
Colby Smith y Kate Duguid
Washintong y Nueva York /

La Reserva Federal de Estados Unidos subió su tasa de interés de referencia en un cuarto de punto porcentual, su décima alza consecutiva en poco más de un año, pero señaló que pronto hará una pausa a su agresiva campaña de endurecimiento monetario.

El último aumento del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por su sigla en inglés), que contó con el apoyo unánime de los responsables de la formulación de políticas, ubica la tasa de interés en un nuevo rango objetivo de entre 5 y 5.25 por ciento, el nivel más alto desde mediados de 2007.

En un comunicado emitido después de su reunión de dos días, la Fed abandonó la orientación anterior que proporcionó en marzo, cuando dijo que “podía ser adecuado un endurecimiento adicional de la política” para controlar la inflación.

El FOMC indicó que tomará en cuenta los aumentos de las tasas realizados hasta la fecha —y el hecho de que tomará tiempo para que repercutan en la economía— a la hora de “determinar hasta qué punto” es adecuado realizar nuevos incrementos. También aseguró que se guiará por los datos económicos futuros.

En una conferencia de prensa posterior a la decisión, el presidente de la Fed, Jerome Powell, calificó de “significativo” el cambio de lenguaje. Advirtió que al parecer las recientes turbulencias bancarias “están resultando en condiciones crediticias aún más restrictivas para los hogares y las empresas”, lo que puede pesar sobre la actividad económica y el mercado laboral.

Y añadió: “A la luz de estos vientos en contra inciertos, junto con la restricción de la política monetaria que pusimos en marcha, nuestras futuras acciones políticas dependerán de cómo se desarrollen los acontecimientos”.

El rendimiento de los bonos del Tesoro a dos años, que se mueven con las expectativas de las tasas de interés, cayó a su nivel más bajo en un mes, ya que los inversionistas apostaron a que este podía ser el último aumento de la Fed del ciclo actual. El rendimiento bajó 0.11 puntos porcentuales a 3.86 por ciento.

Kristina Hooper, estratega jefe de mercado global de Invesco, dijo: “Esto parece una subida moderada. La preponderancia de la evidencia sugiere que la Fed no continuará subiendo a menos que algo en los datos fuerce la mano de la Fed”.

En marzo, la mayoría de los funcionarios proyectaban que la tasa alcanzaría un máximo de 5.1 por ciento este año, lo que sugería que no habría más aumentos más allá del nivel actual.

La reunión se produjo en un momento delicado para la economía y el sistema financiero de EU, ya que los bancos de tamaño medio siguen sufriendo las consecuencias de una serie de quiebras bancarias.

El lunes, First Republic se convirtió en el tercer banco intervenido por los reguladores estadunidenses en los últimos dos meses, con la Corporación Federal de Seguro de Depósitos negociando una adquisición apresurada por parte de JP Morgan. Esto se produjo después de las medidas de emergencia que las autoridades gubernamentales adoptaron en marzo, pocos días antes de la última reunión de la Fed, para frenar el contagio tras la implosión de Silicon Valley y Signature Bank.

Los funcionarios deben tratar de equilibrar una posible contracción del crédito derivada de las turbulencias bancarias con el hecho de que la inflación sigue siendo alta y las presiones sobre los precios solo se moderan gradualmente.

Powell añadió: “En principio, no tendremos que subir las tasas tanto como lo hubiéramos hecho si no hubiera ocurrido esta turbulencia bancaria”.

“La política es estricta”, respondió cuando se le preguntó si la tasa de referencia de 5 a ​​5.25 por ciento era suficiente para controlar la inflación.

Agregó que cuando un salto de 5 puntos porcentuales en la tasa de fondos federales se combina con restricciones crediticias y los planes de la Fed para reducir su hoja de balance, “sientes que es posible que no estemos muy lejos o posiblemente en ese nivel”.

En una señal de que el mercado laboral al rojo vivo ya se enfrió, los nuevos datos de esta semana mostraron que en marzo los despidos subieron al nivel más alto en más de dos años, mientras que el número de ofertas de empleo disminuyó.

Esto sugiere que la tasa de desempleo tendrá un aumento desde su mínimo casi histórico de 3.5 por ciento. En marzo, la proyección máxima promedio entre los funcionarios era de 4.6 por ciento en 2024. 


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