La asombrosa demanda de electricidad necesaria para alimentar la tecnología de siguiente generación obliga a Estados Unidos a recurrir a la fuente de combustible de antaño: el carbón.
Las fechas de retiro de la envejecida flota de centrales eléctricas alimentadas por carbón del país se están retrasando, ya que las preocupaciones sobre la confiabilidad de la red y las expectativas de un aumento de la demanda de electricidad obligan a los operadores a mantener la capacidad en línea.
El cambio en la eliminación gradual de estas instalaciones subraya un dilema cada vez mayor al que se enfrenta la administración Biden, ya que la carrera de EU por liderar la inteligencia artificial (IA) y la fabricación impulsa un crecimiento sin precedente en la demanda de electricidad que choca con sus objetivos de descarbonización. La Agencia Internacional de Energía calcula que la aplicación de ChatGPT utiliza casi 10 veces más electricidad que Google Search.
Se estima que para finales de la década se retirarán alrededor de 54 gigavatios de activos de generación alimentados por carbón en EU, alrededor de 4 por ciento de la capacidad eléctrica total del país, una revisión a la baja de 40 por ciento respecto al año pasado, según S&P Global Commodity Insights, citando preocupaciones sobre la confiabilidad.
“No se pueden reemplazar las centrales alimentadas por combustibles fósiles con la rapidez suficiente para satisfacer la demanda”, dijo Joe Craft, director ejecutivo de Alliance Resource Partners, uno de los mayores productores de carbón de EU. “Para ser pioneros en inteligencia artificial, tendremos que aceptar mantener lo que tenemos”.
Entre los operadores que están desacelerando los retiros se encuentra Alliant Energy, que la semana pasada retrasó de 2025 a 2028 sus planes de convertir a gas su central alimentada por carbón en Wisconsin. A principios de este año, FirstEnergy anunció su intención de abandonar gradualmente el carbón para 2030, citando “preocupaciones por la adecuación de los recursos”.
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La consultora Grid Strategies pronostica un crecimiento de la demanda de electricidad en EU de 4.7 por ciento en los próximos cinco años, casi el doble de lo previsto un año antes, citando la nueva capacidad industrial y de fabricación y los centros de datos que se utilizan para impulsar todo tipo de cosas, desde inteligencia artificial hasta minería de criptomonedas y computación en la nube. Un estudio de Electric Power Research Institute encontró que los centros de datos representarán 9 por ciento de la demanda de electricidad de EU para 2030, más del doble de los niveles actuales.
La Casa Blanca se fijó el objetivo de alcanzar un sector energético libre de contaminación por carbono para 2035. El mes pasado, la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por su sigla en inglés) finalizó una polémica reglamentación para eliminar gradualmente las plantas alimentadas con carbón a partir de 2032, a menos que instalen costosos sistemas de captura de carbono.
La EPA concluyó en sus análisis que el sector eléctrico puede satisfacer la demanda al tiempo que reduce la contaminación y proporciona electricidad de manera confiable y asequible bajo estas reglas, dijo un portavoz, y agregó que la agencia “cree que las reglas tienen un fundamento jurídico firme”.
“Necesitamos más energía, no menos”, dijo a Financial Times el gobernador republicano de Indiana, Eric Holcomb. “No podemos permitirnos perder la guerra de la IA”.
La generación de energía a partir de carbón en EU está en declive a largo plazo y representó 16 por ciento del suministro eléctrico del país el año pasado, frente a casi 40 por ciento en 2014, según la Administración de Información Energética de EU.
Seth Feaster, analista de datos del Instituto de Economía Energética y Análisis Financiero, advirtió del peligro de equiparar los informes de retrasos en los retiros con un aumento en la generación. La EIA proyecta que la generación de energía a partir de carbón en EU caerá otro 4 por ciento este año y las tasas de utilización en las plantas alimentadas con carbón seguirán bajas.
“Retrasar una fecha de retiro no significa que esas plantas se van a utilizar”, dijo Feaster”.