El lunes Ikea abrió su primera tienda en el centro de París, parte de una inversión de 400 millones de euros en tres años en Francia, ya que el minorista de muebles más grande del mundo amplía su presencia en los centros de las ciudades para mantenerse al ritmo de los cambios de los hábitos de los consumidores.
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La tienda es la número 34 de Ikea en Francia, su tercer mayor mercado por ventas después de Alemania y Estados Unidos. Pero es la primera tienda Ikea que se ubica en el centro de una ciudad en Francia. “París es un imán de las tendencias y la moda”, dijo Jesper Brodin, director ejecutivo de la principal división minorista de Ikea, Ingka Group.
“Esperamos usar la tienda de París como un altavoz para el resto del mundo. Si tenemos éxito podríamos llegar a hacer mucho más de estas”.
Ikea Paris La Madeleine se encuentra en el 1 Distrito (1er Arrondissement), una zona popular entre los turistas y cerca de muchos de los sitios históricos de la ciudad. En los últimos meses se encuentra entre las áreas que han sufrido por las protestas contra el gobierno de los gilets jaunes (chalecos amarillos), que han registrado el daño o el cierre de tiendas, pero parece que la participación empieza a disminuir.
A la tienda de París le seguirán inauguraciones similares en Lyon y Niza, dijo el lunes el director ejecutivo de Ikea France, Walter Kadnar, en una conferencia de prensa. La inversión de 400 millones de euros también se utilizará para modernizar las tiendas actuales e invertir en herramientas digitales y logística.
La franquicia de Ikea se desarrolló en una red de enormes instalaciones fuera de la ciudad, donde los clientes conducen a las tiendas, recogen de los estantes sus productos de y los arman en sus hogares. Desde que Brodin se convirtió en el jefe de Ingka Group en 2017, se ha embarcado en una reforma amplia de su modelo de negocio.
Ikea convierte parte de su red de tiendas fuera de la ciudad en centros de distribución para entrega a domicilio, mientras al mismo tiempo incrementa su negocio de compras en línea y aumenta su presencia en los centros de las ciudades para que sean más accesibles para los consumidores.
La nueva tienda Ikea en París tiene un área de ventas de 5,400 metros cuadrados en dos pisos -mucho más pequeña que el área de entre 30 y 35 mil metros cuadrados que son habituales en las tiendas fuera de la ciudad- e incluye un restaurante con capacidad para 150 personas. Alrededor de 1,500 artículos están disponibles para comprar en la tienda.
“No hay un cliente en línea o un cliente en las tiendas físicas típico, la gente mezcla los canales”, dijo Brodin. Aunque la gente compra cada vez más en línea, “aún quieren poder tocar el producto y tener una experiencia física del producto”, agregó.
“Quieren la oportunidad de hablar con una persona para verificar sus opciones. Las máquinas nos ayudarán, pero confiamos en las personas”.
MRA