La inflación subyacente de Estados Unidos aumentó en noviembre, reforzando los argumentos de la Fed de que las tasas de interés pueden permanecer sin cambios durante los próximos meses.
Las cifras mostraron que los precios básicos aumentaron 0.3 por ciento durante noviembre, mientras que la tasa básica interanual se mantuvo estable en 4 por ciento. La medida básica anual, vista como un barómetro de la inflación a largo plazo, excluye los cambios en los precios de energía y alimentos.
La tasa general bajó a 3.1 por ciento, en línea con las expectativas y ligeramente por debajo de la tasa de 3.2 por ciento de octubre.
Después de la publicación de los datos, los inversionistas redujeron sus expectativas de recortes de las tasas de interés.
“La Fed sigue diciéndonos que no tiene la confianza de decir con certeza que la inflación alcanzará (su objetivo) de 2 por ciento en el corto plazo”, dijo Omair Sharif, presidente del grupo de pronósticos Inflation Insights. Añadió que las cifras no indican “una señal de todo en orden”.
Los analistas tomaron los datos de inflación básica como una señal de que el camino para reducir la cifra el próximo año será agitado.
Si bien el mercado todavía anticipa un recorte de un cuarto de punto en las tasas de interés para el próximo mayo, los operadores redujeron sus expectativas después de la publicación de los datos.
Se espera que los funcionarios de la Fed voten hoy para mantener las tasas en su rango actual de 5.25 a 5.5 por ciento.
Janet Yellen, secretaria del Tesoro de EU, dijo que las cifras confirman que la inflación está bajando “significativamente”, mientras que el presidente Joe Biden enfatizó que, a pesar de la caída del índice de precios al consumidor, el desempleo se mantuvo por debajo de 4 por ciento.
“Tanto los salarios de los trabajadores como el patrimonio de los hogares son más altos ahora que antes de la pandemia, ajustados a la inflación”, indicó Yellen.
La Fed prefiere una métrica menos volátil: el índice básico de gastos de consumo personal.
El banco central publicará hoy su último resumen de proyecciones económicas, que será observado con mucha atención en busca de señales sobre cuántos recortes prevén los funcionarios el próximo año.
“Es probable que los responsables de la formulación de la política monetaria mantengan un sesgo de línea dura, dado que los precios siguen subiendo a un ritmo incómodamente rápido y los funcionarios de la Reserva Federal son sensibles a los riesgos al alza de la inflación”, dijo Rubeela Farooqi, economista jefe para EU de la consultora High Frequency Economics.
Los sólidos datos sobre el empleo en EU publicados la semana pasada ya habían hecho que algunos inversionistas revisaran sus expectativas de una ronda de recortes de tasas a partir de marzo.
Pero Alan Detmeister, antiguo economista de la Fed, y que ahora trabaja en UBS, dijo que los últimos datos son “consistentes con una desaceleración general de la inflación”.
Detmeister añadió que aún es posible que el banco recorte las tasas en marzo para garantizar que no se vuelvan demasiado restrictivas para los hogares y las empresas de EU.
Con información de: Nicholas Megaw