La Cámara de Representantes votó a favor de promover el proyecto de ley para elevar el techo de deuda de Estados Unidos, una gran victoria para el presidente republicano del organismo, Kevin McCarthy, que acerca significativamente a Washington a evitar un impago perjudicial.
Se presentaron 314 votos a favor y 117 en contra, después de que 165 demócratas se pusieran del lado de 149 republicanos y permitieran a McCarthy librarse de la rebelión de algunos miembros de su propio partido.
Al final, 71 republicanos votaron contra la medida, muchos de ellos miembros del grupo de línea dura de la Cámara de Representantes.
El proyecto se enviará ahora al Senado, que también deberá aprobar la medida para que el presidente Joe Biden la convierta dará sin dinero y no podrá pagar sus obligaciones el 5 de junio si no se eleva el techo de deuda.
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Kevin McCarthy y la Casa Blanca se han mostrado optimistas sobre la posibilidad de que se apruebe el proyecto de ley, a pesar de que los críticos de ambos partidos se manifestaron contra la medida.
En la derecha, el Freedom Caucus de los republicanos de la Cámara de Representantes criticó el acuerdo por no imponer mayores recortes del gasto. En la izquierda, los demócratas progresistas, incluidas Alexandria Ocasio-Cortez y Pramila Jayapal, arremetieron contra Joe Biden por capitular ante las demandas republicanas.
El proyecto también enfrenta la oposición de los legisladores de ambos lados en el Senado. Bernie Sanders, el senador progresista, se pronunció en contra y dijo que no podía votar “en buena conciencia” porque impone recorte de gastos sin aumentar los impuestos a los estadunidenses ricos”.
Mientras tanto, Mitch McConnell, el principal republicano del Senado, dijo que estará “orgulloso de apoyar” el acuerdo “sin demora” cuando éste se vote en la cámara alta del Congreso.
Chuck Schumer, el líder de la mayoría demócrata en el Senado, dijo que llevará la medida al pleno “lo antes posible” e instó a sus colegas a estar “preparados para avanzar en este proyecto de ley rápidamente una vez que sea el turno de actuar del Senado”.
“No puedo enfatizar lo suficiente que no tenemos margen,
ningún margen para el error”, agregó Schumer. “O procedemos
de manera rápida y enviamos este acuerdo bipartidista al escritorio del presidente, o el gobierno federal incumplirá por primera vez”, advirtió.
Dado que los republicanos controlan la Cámara de Representantes por un estrecho margen, y más de dos docenas de republicanos ya dijeron que votarán en contra, McCarthy contará con el apoyo de los demócratas para que se apruebe el proyecto.
Hakeem Jeffries, el principal demócrata de la Cámara de Representantes, dijo que apoyará el proyecto “sin vacilaciones, reservas ni temores”, y añadió: “No porque sea perfecto, pero en un gobierno dividido, por supuesto, no podemos permitir que lo perfecto sea enemigo de lo bueno”.
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