Los bancos estadunidenses y europeos comenzaron a superar los peores efectos de la pandemia de coronavirus (covid-19) mientras intentan regresar a una situación de normalidad.
Los resultados del segundo trimestre mostraron que los ingresos de la banca de inversión subieron por encima de los niveles anteriores a la pandemia, mientras que los bancos de Estados Unidos (EU) y el Reino Unido recuperaron gran parte del capital que reservaron hace un año en preparación para una ola de incumplimientos de pago.
Los resultados recientes de las pruebas de estrés de los bancos europeos también mostraron que, incluso en los peores escenarios, la mayoría de las grandes instituciones de crédito tienen suficiente capital en reserva para sobrevivir a las consecuencias de la pandemia.
“Definitivamente estamos en el punto en el que los inversionistas reevalúan si se equivocaron el año pasado al pensar en los bancos”, dice James Macdonald, un gestor de fondos especializado en bancos de BlueBay Asset Management.
El último trimestre del año subrayó cómo el equilibrio de poder en la banca de inversión sigue desplazándose de Europa a Estados Unidos.
En medio de una avalancha de negociaciones, Goldman Sachs obtuvo poco más de 3 mil 600 millones de dólares (mdd) en ingresos por asesoría sobre acuerdos y suscripción de deuda y ofertas de capital. En comparación, el que más ganó en la banca de inversión entre los bancos europeos fue Barclays con mil 200 mdd.
Parte de la diferencia se debe a que EU representa poco menos de la mitad de todos los acuerdos de fusiones y adquisiciones en lo que va de 2021. Pero los bancos estadunidenses también reafirmaron su dominio en la banca de inversión europea.
En los primeros seis meses de este año, cuatro de los bancos de inversión con más ganancias de acuerdos europeos, de acuerdo con los datos de Refinitiv, fueron estadunidenses: JPMorgan, Goldman Citigroup y Morgan Stanley. Todos, excepto Goldman Sachs, aumentaron su participación de mercado.
El verano pasado, la banca de inversión de BNP Paribas, registró uno de sus mejores resultados trimestrales en la historia, ya que el banco francés reaccionó para convertirse en la fuerza dominante en el continente europeo.
Pero un año después, los ingresos de las operaciones de banca institucional y corporativa de BNP Paribas cayeron casi 10 por ciento, en comparación con su vertiginoso segundo trimestre de 2020, aunque todavía están 20 por ciento por encima del mismo periodo de 2019.
Mientras que 2020 registró mercados volátiles que llevaron a los ingresos de operaciones bursátiles a niveles récord, este año las ganancias fueron impulsadas por la actividad de fusiones y adquisiciones y de mercados de capital.
Las empresas y los grupos de capital privado liberaron un interés reprimido en las negociaciones, ya que billones de dólares de estímulo del gobierno aumentaron los precios de los activos, mientras que las empresas se apresuran a asegurar un financiamiento barato antes de que aumenten las tasas a medida que se logre vencer a la pandemia.
Esto ayudó a amortiguar una fuerte caída en las operaciones de renta fija, que cayó alrededor de 40 por ciento en el segundo trimestre, a medida que los mercados se normalizan después de las caóticas dislocaciones al principio de la pandemia.
Sin embargo, Andrew Coombs, el analista de Citigroup, advierte que los buenos tiempos tal vez no duren. La rentabilidad en Barclays, donde los ingresos por asesoría se dispararon 160 por ciento, es poco probable que resten ser sostenibles.
El ingreso de Credit Suisse cayó en todas partes como resultado del colapso de Archegos Capital, que llevó a pérdidas de 5 mil 500 mdd y al cierre de 10 mil mdd de fondos de financiamiento de la cadena de suministro relacionada con el polémico financiero Lex Greensill.
Los bancos reservaron miles de millones de dólares para cubrir los posibles incumplimientos de pago de los préstamos en la parte más álgida de la pandemia en el primer semestre de 2020. Las nuevas reglas de contabilidad los obligan a asumir pérdidas tan pronto como ven el peligro de que se llegue a un inclumpiento de pago sobre los préstamos, en lugar de esperar hasta que los solicitantes de los préstamos se metan en problemas.
La tendencia benefició a los bancos de todo tipo, pero las instituciones en Europa se mantuvieron más cautelosas que sus contrapartes estadunidenses. Tan solo JPMorgan recuperó más de 8 mil mdd desde que comenzó el año. Los bancos británicos fueron los primeros en seguir el ejemplo. Sin embargo, en Europa la mayoría de los principales bancos siguieron aumentando el volumen de sus provisiones, aunque a un ritmo mucho más lento que el año pasado.
srgs