Microsoft invirtió en Cruise, unidad de General Motors (GM), en una ronda de financiamiento de 2 mil millones de dólares que le da a la compañía de conducción autónoma una valoración de 30 mil millones de dólares.
Cruise, que General Motors compró por “más de mil mdd” en 2016, cuando apenas tenía 40 empleados, ahora tiene un personal de casi 2 mil y representa más de 40 por ciento de la capitalización de mercado de GM de 71 mil 500 millones de dólares.
Su última ronda de inversión la ubica frente a frente con Waymo, la compañía hermana de Google, como la startup de conducción autónoma más valiosa a escala mundial. Waymo recaudó 3 mil 200 mdd el año pasado para una valoración que no se dio a conocer sobre la que dos personas dijeron a Financial Times que fue de “más de 30 mil millones de dólares”.
La inversión en Cruise es la primera gran incursión de Microsoft en los coches sin conductor, aunque la compañía de software tiene una operación de “coches conectados” que suministra “chasis digitales” y servicios en la nube a empresas como Volkswagen, BMW y Ford.
Satya Nadella, director ejecutivo de Microsoft, confirmó que tanto Cruise como GM van a usar la plataforma de computación en la nube de Microsoft, Azure, “para ayudarlos a escalar y hacer que el transporte autónomo se generalice”.
Mary Barra, directora ejecutiva de GM, indicó que la compañía automotriz más grande de Estados Unidos “obtendrá aún más beneficios de la computación en la nube a medida que lancemos 30 nuevos vehículos eléctricos a escala mundial para 2025 y vayamos creando nuevos negocios y servicios para impulsar el crecimiento”. En las primeras operaciones, las acciones de GM subieron más de 9.5 por ciento después de la noticia.
La última recaudación de fondos se produjo después de un difícil año 2020, cuando el covid-19 detuvo las pruebas de los vehículos sin conductor. Cruise pudo reanudar sus pruebas en San Francisco al convertirse en un “servicio esencial” que proporciona entregas de alimentos con un conductor de respaldo.
“Eso nos permitió permanecer en las calles… mientras hacíamos grandes progresos en la simulación y las pruebas fuera de la calle”, dijo Dan Ammann, director ejecutivo de Cruise, a Financial Times a finales del año pasado. “En un contexto de un año lleno de cosas malas, nos sorprendió positivamente la capacidad de seguir trabajando, continuar con la productividad”.
La mayor parte de sus pruebas la realiza una flota de Chevy Bolts modificados con un conductor de respaldo, aunque a finales del año pasado recibió un permiso para retirar por completo al conductor de seguridad.
No se sabe con certeza cuándo estos coches podrán utilizarse para los pasajeros. En un principio, la compañía esperaba lanzar un servicio de solicitud de transporte sin conductor en San Francisco en 2019; sin embargo, los planes se pospusieron de forma indefinida.
En una señal de progreso comercial, Cruise firmó un acuerdo en noviembre para proporcionar a los clientes de Walmart entregas sin contacto en el área de Scottsdale, Arizona, aunque un conductor de respaldo seguirá al volante.
Vision Fund
El fondo Vision Fund de SoftBank es otro inversionista en Cruise, después de que inyectó 2 mil 250 ´millones de dólares en 2018, a una valoración de 11 mil 500 millones.
Insignia
Hace un año, Cruise dio a conocer su vehículo insignia para transporte compartido, el Origin, un vehículo ciento por ciento eléctrico que se asemeja a un salón sobre ruedas sin volante ni pedales.
Experiencia
Tanto Microsoft como General Motors unirán su experiencia en ingeniería de software y hardware, así como sus capacidades de computación en la nube y conocimientos de manufactura y ecosistema de socios para transformar el transporte.