Las utilidades del primer trimestre del banco Morgan Stanely cayeron casi una quinta parte, ya que la operación patrimonial no logró compensar la desaceleración de las operaciones bursátiles
El jefe de Morgan Stanley, James Gorman, advirtió que los ingresos de la banca de inversión pueden no recuperarse hasta el próximo año.
La prolongada desaceleración de la actividad de banca de inversión afectó a Morgan Stanley y a sus rivales, ya que las turbulencias financieras después de la quiebra de dos bancos regionales de Estados Unidos y deCredit Suisse en Europa mantienen al margen a los responsables de negociaciones.
Gorman indicó que las fusiones y adquisiciones, así como la actividad de suscripción de deuda y acciones, “se mantiene muy moderada”, pero argumentó que con el tiempo estos ingresos van a volver.
“Ya estamos viendo una cantidad cada vez mayor de proyectos de fusiones y adquisiciones y algunas señales de que empiezan a aparecer nuevas emisiones. Dicho esto, se mantiene en gran medida una historia de la segunda mitad de 2023 y de todo 2024”, dijo Gorman durante la conferencia de resultados del primer trimestre.
El crecimiento de su división de gestión patrimonial, fundamental para el éxito de Gormana al impulsar el precio de las acciones, no logró a principios de 2023 recuperar el terreno perdido por la desaceleración de la banca de inversión.
Las acciones de Morgan Stanley cayeron 0.6 por ciento en las operaciones de la mañana en Nueva York, pero se recuperaron y cerraron con un alza de 0.67 por ciento.
Los ingresos netos aplicables a los accionistas ascendieron a 2 mil 980 millones de dólares durante el primer trimestre del año, 19 por ciento menos que en el mismo periodo del año anterior. Los analistas pronosticaron ingresos netos de 2 mil 920 mdd, de acuerdo con datos recopilados por Bloomberg.
Los ingresos de Morgan Stanley por la banca de inversión cayeron 24 por ciento, hasta mil 200 millones de dólares, ligeramente por encima de las estimaciones de los analistas de mil 100 mdd y en línea con caídas similares en los otros grandes bancos de Wall Street.
Los ingresos por operaciones de renta fija, que en los últimos 12 meses se beneficiaron por las agresivas alzas de las tasas de interés por parte de los bancos centrales y de la volatilidad de los mercados en torno a la invasión a Ucrania, bajaron 12 por ciento, para llegar a 2 mil 600 millones de dólares.
Esta cifra superó las estimaciones de los analistas, que la ubicaban en 2 mil 400 millones de dólares, pero quedó por detrás de sus rivales JP Morgan, Citigroup y Bank of America, donde los ingresos se mantuvieron estables o registraron un aumento. El martes, Goldman Sachs informó que los ingresos por las operaciones de renta fija se redujeron 17 por ciento en el primer trimestre.
La división de gestión patrimonial del banco obtuvo ingresos de 6 mil 600 millones de dólares en el primer trimestre, 11 por ciento más que en el mismo periodo del año anterior y por encima de las expectativas de los analistas. La división también obtuvo 110 mil mdd en nuevos activos netos durante el trimestre.
En los últimos años, Gorman amplió las operaciones de gestión monetaria de Morgan Stanley con acuerdos por ETrade y por Eaton Vance, y ayer dijo a los analistas que harán más adquisiciones.
“De eso no cabe la menor duda. Y será en el ámbito de gestión de activos y patrimonial y constantemente mantenemos una lista de quién es atractivo y quién encajaría bien”, dijo, y añadió que no había “nada inminente”.
El banco señaló que los depósitos, de los principales focos de atención de los inversionistas después del colapso de Silicon Valley Bank, cayeron 3 por ciento, hasta 340 mil 900 mdd, desde los 350 mil 600 mdd del trimestre anterior. Muchos de los depósitos proceden de clientes más ricos que suelen ser menos rígidos y más propensos a retirar sus fondos en busca de una mejor tasa de interés.
La directora financiera de Morgan Stanley, Sharon Yeshaya, declaró a Financial Times que la quiebra de Silicon Valley provocó una salida de depósitos hacia productos como fondos del mercado monetario y bonos del Tesoro estadunidense, pero que muchos de estos activos siguen en el banco.
Las utilidades fueron afectadas porque el banco cuadruplicó sus provisiones para posibles pérdidas crediticias, de 57 mdd hace un año, a 234 mil mdd, lo que, señaló, está relacionado con el sector inmobiliario y el deterioro de las perspectivas macroeconómicas.