El mayor accionista de Cuadrilla indicó que va a continuar brindando su “apoyo total” a la compañía británica de fracking, a pesar de que el gobierno de Reino Unido impuso una moratoria sobre la polémica técnica de extracción de gas de esquisto.
AJ Lucas, grupo australiano de servicios de energía que posee 48 por ciento de Cuadrilla, afirmó lunes que continuará respaldando a la compañía británica, “reconociendo que habrá retrasos inevitables en las operaciones y que se va a requerir un financiamiento continuo, aunque reducido, de las operaciones de Cuadrilla”.
Cuadrilla es la única compañía que realiza operaciones de fracturación hidráulica hasta ahora en Reino Unido y esperaba producir comercialmente gas de esquisto desde un sitio cerca de Blackpool en Lancashire, al noroeste de Inglaterra. Sin embargo, el fracking en su sitio de exploración de Preston New Road se tuvo que detener a finales de agosto después de que se desató un temblor de una magnitud de 2.9, que sintieron los locales.
Cuadrilla está en el limbo tras la decisión que tomó el gobierno de Reino Unido el sábado de retirar el apoyo a la incipiente industria después de que en un informe de la Autoridad de Gas y Petróleo (OGA, por su sigla en inglés), el regulador, se concluyó que no es posible con la tecnología actual “predecir con precisión la probabilidad de temblores asociados con el fracking”. La moratoria se mantendrá hasta que “se proporcionen nuevas pruebas convincentes”, dijo el gobierno.
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Las acciones de AJ Lucas, que cotizan en Australia, cerraron el lunes con una caída de 23 por ciento, mientras que las acciones de otros aspirantes al fracking con sede en Reino Unido, entre ellos IGas y Egdon Resources, que cotizan en Londres, también registraron un deslizamiento de 10 y 25 por ciento respectivamente para las operaciones de mitad de mañana en Reino Unido.
El presidente de AJ Lucas, Phil Arnall, dijo en un comunicado que Cuadrilla “continuará trabajando con la OGA para proporcionar al gobierno la confianza necesaria para levantar la moratoria”.
IGas, que llevó a cabo trabajos de prueba pero todavía no hace trabajos de fracking, insistió en que “cada sitio y cuenca puede tener una geología sustancialmente diferente” y que va a “continuar trabajando estrechamente con los reguladores pertinentes para demostrar que podemos operar de manera segura y responsable con el medio ambiente”.
Las esperanzas entre las compañías de fracking de que la prohibición puede ser temporal se plantearon durante el fin de semana cuando la secretaria de Negocios, Andrea Leadsom, dijo en una entrevista con la BBC que el gas de esquisto seguía siendo una “gran oportunidad” para Reino Unido, siempre y cuando la extracción se pueda hacer de manera segura.
Algunas personas en la industria dicen en privado que la prohibición es electoral al tener en cuenta que se otorgaron muchas licencias de esquisto en áreas, como el Midlands (la parte central de Inglaterra) y el norte de Inglaterra, donde el partido conservador necesita obtener escaños para asegurar una mayoría de la Cámara de los Comunes.
El fracking —que implica bombear agua, arena y productos químicos bajo tierra a alta presión para liberar gas de las formaciones rocosas— transformó la industria de energía de Estados Unidos, aunque varios científicos de Reino Unido argumentan que las comparaciones con otros países son irrelevantes debido a las diferencias en geología.
Revisará el informe y dará información
Cuadrilla indicó ayer que revisará “a detalle” el informe OGA y varios estudios publicados por el regulador. Continuará proporcionando datos “para abordar las inquietudes con el fin de que se pueda levantar la moratoria”. Las cuentas publicadas más recientes de Cuadrilla muestran que tenía efectivo por casi 2.3 mdl al 31 de diciembre de 2018, por debajo de las casi 6.4 millones del año anterior.
MRA