En el campo de batalla

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WeWork toma todas las medidas necesarias para garantizar que SoftBank compre acciones acordadas de la compañía.

WeWork acumuló miles de millones de dólares en pérdidas a medida que se expandió.
Eric Platt y James Fontanella-Khan
Ciudad de México /

Varios directores de WeWork criticaron públicamente a SoftBank luego de tratar de retirarse de una inversión prometida de 3,000 millones de dólares (mdd) en el proveedor de oficinas, describiendo el plan de la compañía japonesa de retirarse del acuerdo como “inapropiado y deshonesto”. Bruce Dunlevie y Lew Frankfort, los dos directores de WeWork que supervisaron y aprobaron el rescate financiero de la compañía el otoño pasado, dijeron que tomarían “todas las medidas necesarias” para garantizar que SoftBank lleve a cabo la compra acordada de 3,000 mdd de acciones de empleados y accionistas.


“SoftBank no solo está obligado a consumar la oferta pública de adquisición como se detalla en el acuerdo maestro de transacción, sino que sus excusas para no cerrar son inapropiadas y deshonestas”, dijeron Dunlevie y Frankfort.

El grupo japonés, que invierte lo mismo en telecomunicaciones que en tecnología, notificó a los inversionistas de WeWork que las investigaciones regulatorias sobre la compañía podrían permitirle retirarse de las adquisiciones previstas, las cuales incluyen una compra de acciones por valor hasta de 970 mdd del cofundador de WeWork, Adam Neumann.

La amenaza de SoftBank planteó decenas de preguntas, no solo para el futuro de WeWork, sino sobre la salud del propio grupo japonés. El valor de las acciones de SoftBank cayó más de la mitad desde finales de febrero, cuando se produjo una venta masiva global de acciones provocada por el brote de Covid-19, un golpe mucho peor que las caídas que se experimentaron en el mercado general.

SoftBank dijo el domingo que siguió cumpliendo con sus obligaciones y que ya había proporcionado más de 5,000 mdd en capital de trabajo a WeWork desde octubre, cuando acordó rescatar a la compañía.

Los 5,000 mdd incluyeron una inyección de efectivo de 1,500 mdd, así como 2,200 mdd en deuda y una línea de crédito de 1,750 mdd para WeWork por parte de Goldman Sachs, que garantizó SoftBank. “La oferta pública de adquisición no tiene impacto en el compromiso de SoftBank con WeWork o en la fortaleza financiera de la empresa”, dijeron los japoneses en un comunicado.

“SoftBank informó a los accionistas que todas las condiciones de cierre acordadas deben cumplirse antes de que se pueda completar la oferta pública de adquisición. Hasta el momento, no lo han hecho”. WeWork no quiso hacer comentarios.

Una pelea entre WeWork, los inversores (incluyendo a Neumann) y SoftBank marcaría un giro sorprendente para el grupo, en un momento en que se enfrenta a las consecuencias del Covid-19.

Involucraría algunos de los nombres más importantes del ámbito legal, con abogados de Skadden Arps, Paul Weiss, Weil Gotshal & Manges, Morrison & Foerster y Wilson Sonsini.

El rescate tenía la intención de cambiar el rumbo de WeWork, que acumuló miles de millones de dólares en pérdidas a medida que se expandía a más de 140 ciudades. Un nuevo equipo de liderazgo que instaló SoftBank comenzó a trabajar en recortes de costos y renegociaciones de arrendamientos con sus propietarios.

Ahora, con el desacuerdo en el Consejo de Administración de WeWork—SoftBank designó a varios miembros del Consejo junto con los señores Dunlevie y Frankfort—, no está claro cómo avanzará la empresa. El argumento de SoftBank a favor de retirarse de la oferta pública de adquisición de acciones por 3,000 mdd dependerá de cómo un juez de EU interprete la redacción en su acuerdo de adquisición.

El grupo japonés dijo a los accionistas que tenía la capacidad de retirarse del acuerdo si podía probar que las investigaciones de la Comisión de Bolsa y Valores de EU (SEC, por sus siglas en inglés) o el fiscal general de EU para el Distrito Sur de Nueva York tendrían un “efecto adverso concreto” en la compañía, o resultar en una “responsabilidad material” para SoftBank o su fondo Vision Fund respaldado por Arabia Saudita.

Actualmente, la SEC examina cómo WeWork y Neumann presentaron la información financiera y la valoración de la compañía a los empleados e inversionistas, según personas con información sobre el asunto.

Pocas empresas han logrado activar una cláusula de efectos adversos importantes, sin embargo, eso ha llevado a la renegociación de acuerdos.

Se esperaba que la compra de acciones por 3,000 mdd pagara  aproximadamente 350 mdd a la firma Benchmark Capital de Dunlevie si ofrecía toda su participación, según los documentos que pudo revisar FT. Los empleados de WeWork también esperaban ansiosamente el desembolso de SoftBank después de la cancelación de la oferta pública inicial de WeWork el año pasado.


SRGS

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