Fidelity National Information Services (conocida FIS) dio a conocer sus planes para comprar Worldpay en un acuerdo de 43 mil millones de dólares con el que la firma estadunidense de tecnología financiera se convertirá en uno de los mayores proveedores de infraestructura financiera que alimenta bancos y pagos.
El acuerdo de FIS, una compañía de adquisiciones con sede en Florida, es el último de una serie de fusiones y adquisiciones que llevan a cabo proveedores de pagos, impulsado por el rápido crecimiento del sector en los últimos años a medida que los clientes cambian de usar efectivo a pagar con tarjetas o en línea.
En Reino Unido, donde Worldpay es el principal procesador de pagos, más de dos tercios de los pagos ahora se llevan a cabo digitalmente, en comparación con menos de 40 por ciento en 2007, de acuerdo con las cifras de UK Finance.
El crecimiento de los pagos en línea y con tarjeta provocó una ola de acuerdos ya que las compañías buscan consolidar una industria fragmentada. Más recientemente, el procesador estadunidense de pagos Fiserv acordó comprar a su rival First Data en un trato de 39 mil mdd en enero.
El grupo combinado habría generado ingresos de 12 mil 300 mdd y ganancias ajustadas antes de utilidades, impuestos, interés, depreciación y amortización de 4 mil 900 mdd en 2018.
“La escala es importante en nuestra industria que cambia rápidamente”, dijo Gary Norcross, de FIS, quien seguirá como presidente del consejo de administración, presidente y director ejecutivo, FIS dijo que tiene el objetivo de obtener 700 mdd de sinergias de EBITDA por la reducción de costos y las ventas cruzadas en los próximos tres años.
El acuerdo marca la segunda vez que un grupo estadunidense adquiere Worldpay desde que se dividió del Royal Bank of Scotland como condición de su rescate financiero por parte del Estado en la crisis de 2008.
El año pasado, la estadunidense Vantiv adquirió Worldpay en un acuerdo de 10 mil 400 mdd, después de eso la empresa de EU tomó su nombre.
Con información de Nicholas Megaw, Arash Massoudi y Sarah Provan